De Vito – Arty Party (Naked Man Recordings/King of Patio)
Tras años curtiendo sus canciones por variopintos escenarios, la banda zaragozana formada por Fuxedo, Ed Sullivan y Malatesta, al fin ha visto publicado su primer trabajo, bautizado con el nombre de Arty Party (2009). El trío ya venía avisando desde hace tiempo, alzándose en el 2007 con el premio demoscópico otorgado por Mondo Sonoro Aragón, además de haber quedado bien posicionado en otros concursos como Muévete en Directo, Lagarto Rock, o el reputado Proyecto Demo del FIB.
Un vinilo rosa de 12 pulgadas -editado en una tirada limitada- tiene el honor de inaugurar el casillero de referencias del grupo, aunque los músicos desafían la crisis de la industria regalando también la descarga de los cinco petardazos aquí incluidos.
La veda se abre con “Alles auf Deutsch”, tema de sacrílego estribillo al estilo de los gallegos Triangulo de Amor Bizarro, con la batería electrónica de Malatesta mostrando el camino a unos loops que convierten el tema en idóneo para la pista de baile, como si de unos Klaxons o The Rakes se tratase. Si pegadizo es este primer corte, no lo es menos su continuación. Una modernidad chocarrera bajo el título de “Clap Your Hands and Say Co!”, donde parece que Fabio McNamara sodomizase a los Ramones entre teclados sintéticos. Por su parte, “Arturito y Citripio” es el tema más anecdótico del lote, resultando una especie de auto publicidad de menos de dos minutos. “Buenas Noches Beirut” vuelve a dar con la fórmula mágica, en un nuevo disparo certero al centro de la discoteca, con el vocalista Fuxedo desgañitándose, desatado y sin complejos. “De Putas y Astronautas” cierra esta corta pero recia publicación, y recuerda a la rave de Primal Scream en XTRMNTR (2000), con (otra) letra de lo más ácida y excéntrica.
Todo el minutaje disfruta de una excelente producción que, respetando la experimentación y el barroquismo primitivo marca y seña del grupo, insufla de un sonido nítido y agradecido a las canciones. Art rock, agresividad, horteradas, paranoia y cajas de ritmos. Fiesta y exceso. Por momentos puede parecer que De Vito son una ilusión sónica, pero son tan reales como el bigote que luce su cantante.