Cuéntame una canción: «Wild thing» de The Troggs
«Wild thing» es una de esas canciones que cumple a rajatabla la máxima menos es más. Siendo más, en este caso, también sinónimo de bizarro. Resulta bastante increíble como una composición gestada en apenas 15 minutos esté rodeada de tanta peculiaridad.
Empecemos por el árbol genealógico. No asustarse que será breve. El padre de la canción es Chip Taylor, de nombre real James Wesley Voight, que es hermano del famoso actor Jon Voight, cuya hija, como ya han adivinado los espabiladillos, es la archifamosa actriz Angelina Jolie. El tío de la bella es oriundo de New York y será allí, en Norteamérica, donde empiece a hacerse un nombre como compositor, principalmente de estilo country.
Son los mediados de los sesenta y la música cambia de manera vertiginosa. El productor Gerry Granahan encargó a Taylor una composición de tinte rockandrollero para Wild Ones, banda neoyorquina residente en el Arthur Club. La banda liderada por Jordan Christoper eran casi más admirados por sus impecables peinados que por sus discos, de hecho, su último trabajo obtuvo poco reconocimiento.
Cuenta Chip Taylor que todo surgió de una manera rápida y poco seria. Básicamente bosquejó tres acordes simples con la guitarra y los tocó de una manera muy percusiva. Cerró los ojos y se imaginó delante de una guapa chica a la que quería cautivar. Y así, de una manera tan de andar por casa, las ideas para la letra empezaron a inundar al compositor.
Sin tiempo que perder, se lanzó a grabar la demo con el ingeniero Ron Johnson, quien será el encargado de rellenar el vacío de la parte central. Chip no tenía claro que poner en ese tramo instrumental, cuando, de repente, Ron empezó a hacer esa especie de silbido que pasa a través de las manos cerradas, que, inexplicablemente, cuando eres pequeño pasas las horas haciendo. He de confesar que nunca conseguí producir sonido alguno.
Wild Ones y sus melenas molonas pasaron por el estudio y realizaron la primera de las grabaciónes de «Wild thing». El resultado no se ajustó a la demo realizada por Taylor y carece de los silencios y pausas que le dan tensión sexual y musical a la canción. Será una armónica la encargada de cubrir el solo del intermedio, pero abusaron de su uso a lo largo de la canción. Los propios protagonistas reconocieron que su interpretación no supo captar el alma que requería, aunque no deja de ser una buena versión R’N’B.
Tan solo unos meses después, en la primavera del 66, se gestaría el segundo y definitivo asalto de la composición. La demo original cruzó el atlántico gracias a Larry Page, productor que recibió un puñado de maquetas de su enlace americano, por si necesitaba material en alguna de sus producciones. En ese momento, se encontraba trabajando con The Troggs (The Troglodytes en sus inicios), quienes estaban ansiosos de remontar la mala recepción de su primer single; «Lost girl».
Toda buena historia necesita un poco de polémica. Nuestra protagonista la tiene en saber quien eligió «Wild Thing» para que fuese grabada por The Troggs. Por un lado, Larry insiste en que fue su decisión, pues quería que la banda grabase en la cara A «Did you ever have to make up your mind?” de The Lovin’ Spoonful, y en la cara B «Wild Thing». El grupo, sin embargo, asegura que fueron ellos quienes eligieron, claramente, la segunda, ya que no les pegaba mucho el cover de los Spoonful.
Sea como fuere, los trogloditas dieron en el clavo. En tan solo 20 minutos y en 2 tomas terminaron el tema que les cambiaría la vida. Fue grabado en directo con la crudeza y, sobre todo, las pausas y el carácter que Chip Taylor tenía en mente. El cantante, Reg Presley, supo llevar perfectamente su interpretación por la senda de la provocación que demanda un apellido como el suyo.
Uno de esos trucos de magia que acontecen en el proceso de grabación, fue la idea del ingeniero de sonido de grabar el rasgueo de las púas de guitarra para darle una sensación más acústica. Pero el verdadero puntazo en el apartado musical, es la inclusión del solo de ocarina más famoso de la historia. Sí, habéis oído y leído bien; Ocarina. La banda al escuchar la demo interpretó que ese era el instrumento del intermedio, por lo que el director musical Colin Fretcher lo incorporó a la grabación.
El éxito fue instantáneo a ambos lados del atlántico. Se encaramó a lo más alto en los states y se quedó un escalón por debajo en Reino Unido. El sello Fontana lanzó inmediatamente el single en UK, pero tenía dudas en hacer lo propio en América. Una vez despejadas aceptaron distribuirlo en USA, pero, como el que no corre vuelva, el manager ya tenía firmado con Atco otro contrato de distribución. Debido a que los dos singles usaron el mismo máster original, ambas ventas son contabilizables, por lo que es el único single en llegar al Nº1 con dos sellos diferentes.
The Troggs nos dejarían otros himnos como «With a girl like you», «I can´t control myself» o «Love is all around us», esta última ya alejada del caveman rock por el que se hicieron conocidos. Años después se convertirá en un megaéxito con la versión de Wet Wet Wet para la película Cuatro bodas y un funeral. En 1968 las nuevas tendencias sonoras hicieron desvanecer su tremenda popularidad y la banda dejó de estar en la primera plana musical.
«Wild thing» se convirtió en un cover comodín que además funcionaba muy bien en directo. Uno de los artistas que se atrevió con la canción fue el mismísimo Jimi Hendrix. No solamente la grabó en estudio, sino que dejó para la posteridad uno de los momentos más memorables de la historia del rock, cuando prendió fuego a su guitarra mientras interpretaba la canción en el Monterey Pop Festival de 1967.
Chip Taylor se embolsó, como os podéis imaginar, cantidades ingentes de dinero como autor de la canción, que fue despilfarrando durante años en casinos al escalofriante ritmo de 10.000 dólares al día, hasta que fue prohibida su entrada en muchos de ellos.
Hay registradas cerca de 7.300 licencias de grabación de «Wild thing» hasta nuestros días, que son claro reflejo del legado perenne que posee. El gran acierto de The Troggs fue realizar una grabación muy cruda y fiel a la idea del compositor. La mayoría de las bandas hubiesen dedicado mucho tiempo a cubrir de capas y adornar un tema que es efectivo en su crudeza, no en su decoración. Mucho se ha hablado de su influencia en la génesis del movimiento punk y en su inspiración a infinidad de bandas en un acercamiento a la música más minimal. Es esa sencillez y honestidad la que hacen que sea una canción atemporal, independientemente del estilo con el que vista.
Para poner el punto y final, que mejor manera que el anuncio grabado en 2019 por la sobrina del compositor, Angelina Jolie, para de la marca francesa de perfumes Guerlain. ¿Adivinan que canción utilizaron? Se cierra el círculo.