Godspeed You! Black Emperor – G_d’s Pee AT STATE’S END! (Costellation/Popstock!)
Godspeed You! Black Emperor han vuelto para ponerle banda sonora a esta distopía postapocalíptica con la que nos está tocando lidiar desde hace ya demasiado tiempo. Llega una nueva lección de post rock ruidista no apta para oídos complacientes, una banda sonora para acompañar a la desintegración de ese mundo que conocíamos; hoy lleno de miedos, extremismos, virus letales, miseria y populismo de todo a 100.
Aunque sean compañeros de escena de Mogwai, si los escoceses mostraban esperanza y luz en su reciente y genial As The Love Contiunes, Godspeed You! Black Emperor no se van por las ramas y nos sueltan la hostia a las primeras de cambio. “Este disco trata sobre todos nosotros esperando el final” cuentan los de Montreal, que ya desde el título advierten que Dios se está meando sobre nosotros.
G_d’s Pee AT STATE’S END! está dividido en cuatro partes que conforman ocho canciones. El primer acto compuesto por «A Military Alphabet (five eyes all blind) (4521.0kHz 6730.0kHz 4109.09kHz) / Job’s Lament / First of the Last Glaciers / where we break how we shine (ROCKETS FOR MARY)» es una perfecta apertura para dar rienda suelta a su arsenal musculoso de experimentación en el que voces de radio se entremezclan con sus característicos rasgeos de guitarra y esas percusiones casi enfermizas que conviven entre cuerdas y rock progresivo.
Tras ese viaje de 20 minutos llega la concisa «Fire at Static Valley», una desconcertante canción de postrock llena de belleza que anticipa una nueva pieza larga, compuesta por “GOVERNMENT CAME” (9980.0kHz 3617.1kHz 4521.0 kHz) / Cliffs Gaze / cliffs’ gaze at empty waters’ rise / ASHES TO SEA or NEARER TO THEE», donde vuelven a mostrarse tan imponentes, poderosos y épicos como en los momentos más brillantes de su larga carrera. Ponen la guinda con esa suerte de ambient orquestado y emocional que es «OUR SIDE HAS TO WIN (for D.H.)», que nos quita cierto regusto amargo de la boca, ejerce de placebo y nos prepara plácidamente para lo que tenga que llegar. Genios.
BRUTAL
Vaya pasada de disco, buen año para el postrock, no cabe duda