En el nombre de la piratería
Hace unos días muchos madrileños se veían sorprendidos por la noticia del cierre de Madrid Rock, una emblemática tienda de música de la capital del Estado con casi un cuarto de siglo a sus espaldas, que según sus responsables se veía abocada al cierre por lo poco rentable que era mantener ese espacio por culpa de la piratería e internet.
En las últimas horas parece que las cosas han cambiado y que ésta ya no es la causa, al menos principal, que ha llevado al cierre de Madrid Rock. Al parecer el principal responsable de este cierre es el negocio inmobiliario, igual de respetable, más rentable que una tienda de discos y que no está sujeto a los piratas y maleantes del ciberespacio que quitan el sueño a los honrados vendedores de discos y a los encorbatados abogados de la SGAE del nunca bien ponderado Teddy Bautista.
Sin embargo, entre tanta polémica siempre suele haber unos cuantos perjudicados. Y no nos referimos a los compradores habituales de la tienda, que aunque les pese el cierre de este espacio, que durante estos días podrán hacer acopio de un buen número de discos a mejores precios y más adelante encontrarán lo que busquen en otros lugares. Los grandes perjudicados son sin duda los cuarenta y seis trabajadores de la tienda, todos con nombre y apellidos, que por los intereses de los que hasta dentro de poco tiempo son sus jefes, se han quedado en la calle, teniendo que aguantar además unas excusas bastante burdas.
Estos trabajadores han convocado el próximo lunes una concentración el próximo lunes 28 de febrero a las 14:00 horas delante de Madrid Rock y han explicado los motivos en el siguiente comunicado:
«- Para defender nuestros derechos como trabajadores. Como ya es conocido, la tienda va a cerrar en breve sus puertas. La empresa ha aducido, incluso en entrevistas en medios de comunicación tanto locales como nacionales, qué es por motivo de la piratería discográfica y de las descargas por Internet, pero el motivo real es qué un poderoso grupo textil tiene apalabrada la compra del local por una abultada cantidad. Es decir, qué los dueños han visto la posibilidad de un negocio redondo sin moverse del sillón y han echado la culpa a causas ajenas, sabiendo qué los medios de comunicación y el público en general iban a creérselo. Los trabajadores no hemos sido informados oficialmente del hecho en ningún momento. En las negociaciones para la liquidación la empresa ofrece 25 días por año trabajado, cantidad claramente insuficiente. Además, se ha empezado a liquidar el género de la tienda sin llegar a un acuerdo previo con los trabajadores, lo cual es manifiestamente ilegal. Por culpa de intereses inmobiliarios, Madrid va a perder un punto de referencia en la cultura musical, y además, 46 trabajadores van a ir a la calle.
– Los trabajadores podemos demostrar fehacientemente qué la tienda sigue siendo rentable, y qué el único motivo del cierre es la especulación inmobiliaria y el afán de lucro desmedido de los dueños. No te dejes engañar, la piratería NO ES LA CULPABLE.
– Y por último, si te gusta la música, no debes permitir qué un punto de encuentro de los amantes de este arte desaparezca así como así. Pasa este mensaje a todo el mundo qué conozcas interesado por la música, publícalo en
todos los foros dedicados al tema en los qué entres y acude a la concentración el próximo Lunes 28 de Febrero a las 14 horas.
Gracias por tu atención.
Los trabajadores de Madrid Rock. «