Yo Estratosférico – Potencialmente infinitos (Autoeditado)
Tras su debut el año pasado con Japonés Hablado (Rock CD Records, 2015), un álbum que mereció buenas críticas y algunas menciones entre lo mejor del año, Yo Estratosférico se volvieron a meter en el estudio y el resultado lo estamos disfrutando ya desde hace un par de meses. Potencialmente Infinitos (Autoeditado, 2016) es un disco en el que consolidan todo lo bueno que ofrecían en su primer LP. Con más presencia de guitarras y bastante menos de sintetizadores, en este segundo trabajo los de Guadalajara buscan reflejar la potencia y el sonido intenso que desprenden sus directos, un sonido grande y envolvente que parece rozar la épica grandilocuente del indie rock que triunfa en este país pero intentando no caer en demasiados de sus lugares comunes.
Aunque sea inevitable acordarse de grupos como Izal o incluso Vetusta Morla, y a pesar de que la voz de Jose, el cantante, tiene ese timbre tan reconocible que a todo el mundo le recuerda a Bunbury, lo cierto es que las canciones de Yo Estratosférico resultan lo bastante elaboradas como para dar a entender que hay una personalidad propia, un afán de buscar y de reinventar más que de imitar, tras ellas. Esa búsqueda de intensidad queda de manifiesto nada más arrancar con“Vive lejos muere cerca”, uno de los singles de adelanto, y que empieza (y sigue) con una sección rítmica apabullante, sobre todo el bajo. Un bajo de nuevo presente al inicio de “¡motín!”, actuando prácticamente como hilo conductor de toda la canción. Unas guitarras que también disfrutan de sus momentos de gloria, marca de la casa junto a los estribillos poderosos y las subidas y bajadas de intensidad, le dan al tema ese tono épico del que hablaba anteriormente.
No estamos, sin embargo, ante canciones ostentosas pero vacías de contenido. Vale la pena darle una escucha atenta a las letras de canciones como la mencionada “¡motín!”, “El camino de hielo”, “Tacho tu nombre”, “Reijkavik”, la magnífica “Contra arrecifes”… En general todas las letras resultan interesantes, nada obvias, casando perfectamente con el gusto del grupo por las melodías vocales y los estribillos poderosos pero con una buena dosis de introspección y reflexión.
En resumen, un disco que puede disfrutarse desde muchos puntos de vista, a diferentes niveles, con un discurso que no se agota a las pocas escuchas sino todo lo contrario.