Nada Surf (Sala Antzokia) Bilbao 30/04/16
You Know Who You Are (City Slang, 2016), es el título del octavo disco de estudio de Nada Surf, y la razón por la que acaban de recorrer media Europa de sala en sala. Quizás porque ya han pasado veinte años desde su debut (High/Low, 1996, Elektra), los neoyorquinos se han tomado esta gira como algo especial, fichando como segundo guitarrista a Doug Gillard (Guided By Voices), y ofreciendo lujosos conciertos de más de 25 canciones. Así que, después de ver el nivel que ofrecieron en Madrid, no pudimos resistir la tentación de repetir en Bilbao, con idéntico resultado: un concierto de los que hacen afición. Es lo que pasa cuando juntas una banda repleta de argumentos musicales y deseos de agradar, con una sala llena de fans.
El show de Nada Surf combina lo mejor de su último disco (“Cold to see clear”, “Believe You’re mine”, “Friend Hospital”), con un completísimo recorrido por toda su discografía, destacando amplias paradas en The Weight is a Gift (“Always Love”, “Concrete Bed”) o Let Go (“Inside of Love”, “Blonde on Blonde”), álbum que acaban de reeditar en vinilo. También hubo tiempo para rescatar dos canciones de su, no muy habitual en directo, primer trabajo, la mítica “Popular”, y, sobre todo, “Deeper Well”, una auténtica rareza.
A pesar de la exuberancia de la oferta, al público bilbaíno le costó entrar en calor. Tuvo que ser “Do it Again”, el tema que convirtiera el concierto en una celebración permanente. El grupo, encantado con el ambiente, respondió con cariño y bromas al entusiasmo del Kafé Antzoki. Mención especial merecen los tres chicos que ocupaban la escalera cercana al escenario. Bailaron hasta el paroxismo (eso sí, como si aquello fuera hip hop), absolutamente todo lo que escucharon. En varios momentos pareció que iban a tomar el escenario, pero afortunadamente, el amor no llegó al río.
La primera parte del concierto se cerró con un karaoke de “See this bones”, que continuó durante el bis con “Hyperspace” y “Popular”. Cuando aquello parecía haber terminado, faltaba lo mejor, «Blizzard Of ’77» y «I Like What You Say» en acústico y con media sala rodeando al grupo en medio de un emocionante silencio. Un concierto para recordar durante otros 20 años.