Van Morrison – The Prophet Speaks (Caroline/Music As Usual)
Van Morrison se lo está pasando en grande durante los últimos años. El de Belfast mantiene un estatus privilegiado desde hace décadas, y eso le da carta libre para hacer lo que se le antoje sin que nadie parezca plantear objeción alguna al respecto. Que, a pesar de la delicada tesitura en la que se encuentra inmersa la industria discográfica, el hombre decide sacar dos discos en el mismo año, pues sin problema alguno. El autor repite así la osadía de la temporada pasada, en la que firmó despreocupadamente Roll With The Punches (Caroline, 17) y Versatile (Sony, 17).
Si en abril veía la luz You’re Driving Me Crazy (Sony, 18), ahora es turno para este The Prophet Speaks (Caroline, 18) que ejerce como notable y coherente continuación. El norirlandés vuelve a firmar un disco de blues clásico repartido entre versiones de artistas como Sam Cooke, John Lee Hooker, Willie Dixon o Solomon Burke y composiciones propias. Resulta complicado encontrar a un músico que asimile el género con tanta propiedad y solemnidad, y lo haga además con un disfrute personal que se antoja palpable y contagioso. El vocalista se compaña de una banda impecable –el multi-instrumentista Joey DeFrancesco, Dan Wilson (guitarra), Michael Ode (batería) y Troy Roberts (saxo)– que (por supuesto) clava cada uno de los temas. Por su parte, la interpretación de Morrison mantiene su habitual intensidad, imponiéndose como un torrente que atraviesa cada canción desde el principio hasta el final. Este es un álbum tomado por esas formas tradicionales que el autor dibuja sin borrones, y dotado con una elegancia inalterable a lo largo de su hora y diez minutos de duración. El contenido está limitado a ese blues con cuerpo, salteado con pinceladas de rhythm & blues y de un jazz vocal no menos tradicional. La obra que hace la número cuarenta dentro de la trayectoria de George Ivan Morrison se revela como una especie de auto-homenaje que, a pesar de haber sido registrado en los estudios D. Sausalito de California, recrea con maestría y encanto esas atmósferas de los directos impecables.
Sin embargo, la divinidad del músico no exime que el asunto pueda llegar a saturar, y el total de catorce temas (que sumar a los quince lanzados solo ocho meses atrás) pueden llegar a resultar excesivos para cualquiera que no se manifieste como fanático del género o directamente del propio firmante. Un aviso seguramente necesario, pero que no oculta que The Prophet Speaks (Caroline, 18) es, a todas luces, un gran disco. Sobre todo por aquella empatía desprendida de una ejecución y sonido intachables, capaz de transmitir al oyente las mismas sensaciones vividas por los propios músicos a la hora de dar forma a cada una de las piezas.
Escucha Van Morrison – The Prophet Speaks
VAN THE MAN