The Long Blondes – Moby Dick (Madrid)
No sabemos si ser nombrada como una de las 30 personas más cool del rock por el NME o atesorar premios como los de Mejor banda sin contrato del 2005 y Mejor nueva banda británica del 2006 para The Guardian, Vogue o NME, sirven de aval para una carrera musical larga y fructífera, pero lo que está fuera de toda duda es que producen una expectación inusitada en torno a cualquier grupo. Tal es el caso de The Long Blondes, tres chicas y dos chicos de Sheffield dirigidos por Kate Jackson, que prácticamente sin publicar su primer álbum (Someone To Drive You Home) en España con Sinnamon, abarrotaron hasta la reventa la Sala Moby Dick de Madrid al mejor estilo de sus vecinos de ciudad Arctic Monkeys.
Antes de que las británicas comenzaran su show, otro grupo comandado por chicas, Hello Cuca, aprovechó para dinamitar la pista del Moby presentando su nuevo trabajo titulado Incrucificables, un disco autoeditado que de momento sólo distribuyen en formato LP. Rock, punk y surf llenos de contrastes son las armas de este trío murciano que con un directo sencillamente brillante nos dejaron con ganas de más y demostraron porqué son elogiados continuamente por gente como Astrud.
A continuación, la última vuelta de tuerca a la new wave a base de riot girl y Pulp hizo su aparición en el escenario para demostrar que la etiqueta de grupo revelación les va como anillo al dedo. Lo hicieron con creces.
Comenzaron sin prisas pero pronto recurrieron a sus mejores armas, los hits como «Weekend without make up». El público (chicas y chicos por igual), seducido por la voz y la actitud descarada y sexy de Kate, respondió entrando de lleno en el concierto que seguía adquiriendo ritmo y calor gracias al buen hacer de la guitarra de Dorian Cox y de Screech en la batería, y a temas como «Only lovers left alive», «You could have both».
El punto culminante llegó con «Once And Never Again», una canción con la que The Long Blondes dejan claras sus directas intenciones («You’re only 19 for God’s sake, Oh, you don’t need a boyfriend»), y se mantuvo hasta cerrar el que fue su último concierto del año con «Aproppiation», interesantísimo single que extrañamente no ha sido incluido en Someone To Drive You Home.