Entrevista: Viva Belgrado
“Estamos más que dispuestos a tocar en festivales, aunque desentonemos un poco”
Viva Belgrado es una banda que vive en un viaje constante. Metafórico y literal. Con temas como “(Pleiades/)Pasaportes”, “Aeropuertos” y “Transatlántica”, los de Córdoba se han lanzado de nuevo a la carretera para presentar su segundo trabajo de estudio, Ulises (Aloud Music, 2016), por 15 países diferentes. Ahí es nada. El pasado 13 de enero, horas antes de su concierto presentación en Madrid —al que llegaron con “sold out”, por cierto—, quedamos con ellos en una céntrica cafetería de la capital para conocer un poco más al cuarteto andaluz y su particular manera de entender la industria musical y todos sus entresijos.
“Flores, Carne”(Tokyo Jupiter, 2014), vuestro primer LP, fue muy aplaudido por la crítica y el público. Con “Ulises”, por otra parte, sufristeis esa “presión del segundo disco” por la que pasan todas las bandas. A veces es difícil superar el debut. Con la distancia que dan estos meses que han pasado desde que lanzarais vuestro segundo álbum, ¿qué impresiones os llegan ahora del mismo?
Cándido: Hay un poco de todo. En general, se ha dicho que el disco es bastante continuista, pero aportando nuevos registros. Nosotros también los sentimos así. No repetimos fórmula, aunque sí que hay muchas referencias obvias al primer disco. Hay nuevos registros tanto líricos como instrumentales. En los foros también hay gente que se queda con el primero y gente que se queda con el segundo. A nivel de crítica especializada, sí que se ha valorado mucho más el segundo; no sé si por la labor de promo de Aloud, porque ha gustado más o porque ha sido un poco más accesible.
Después del parón navideño, retomáis la gira que os llevará, esta vez, por 15 países. Dos más respecto a la gira anterior. Habéis cosechado una gran cantidad de público extranjero. ¿Consideráis que tenéis mayor proyección internacional?
Cándido: Nosotros salimos fuera porque elegimos salir, porque queremos, no porque haya un reclamo de Viva Belgrado fuera. Por suerte, el circuito en el que nosotros nos movemos, el de hardcore, posthardcore, screamo y derivados, está muy abierto. Supongo que porque es algo muy minoritario está abierto a otros idiomas, al margen del inglés. Nosotros, entre comillas, nos aprovechamos de eso, y podemos girar con libertad por muchos países y ciudades; pero hay muchísimo más vínculo con el público español, y se nota que hay una base de seguidores más grande.
Como comentabais, vuestro circuito es minoritario, de nicho, al menos en España. ¿Es más fácil conseguir conciertos fuera?
Álvaro: Fuera de España hay más lugares en los que tocar, quizás porque hay un mayor circuito underground de centros sociales o de gente que organiza conciertos sin ningún tipo de pretensión de beneficios. Pero es verdad que aquí existe una escena, fuera de lo que son las grandes salas, que igual también se está enfocando a grupos que mueven a gente de diferentes estilos. Si te mueves dentro de ella, al final siempre vas a tener un sitio donde tocar y gente que hace conciertos porque les gusta.
A la hora de organizar los conciertos, ¿veis diferencias entre cómo se gestionan en el extranjero y cómo se hacen en España?
Cándido: Es lo que decíamos antes. Cuando salimos fuera nos movemos, sobre todo, en un circuito de centros autogestionados, eventos benéficos, festivales antifascistas, relacionados con el veganismo, etc., y se nota mucho que hay una filosofía muy diferente. Aquí también existe ese circuito, aunque de manera mucho más minoritaria. Con este segundo disco, en España nos estamos moviendo especialmente por un ambiente de salas profesionales y de festivales con ánimo de lucro. Así que sí, creo que hay una diferencia palpable.
El año pasado tocasteis en el Primavera Sound pero, ¿creéis que tal y como está el panorama musical “alternativo” en nuestro país, hay espacio en los festivales para una propuesta como la vuestra?
Cándido: Lo del Primavera fuera una sorpresa, la verdad. A mí me gusta pensar que los festivales se están abriendo. El Primavera, de hecho, es un festival muy ecléctico; no es como el SOS, por ejemplo, aunque creo que también podríamos encajar ahí. Por nuestra parte, estamos más que dispuestos a tocar en festivales, aunque desentonemos un poco. Mientras nos inviten y el acuerdo sea favorable para ambas partes…
En una entrevista vuestra comentabais que erais gente tímida, lo cual se plasmaba, por ejemplo, en vuestra forma de colocaros en el escenario —de manera semicircular—, como si estuvierais tocando para vosotros. ¿Esta disposición se hizo de forma consciente.
Ángel: Salió de forma natural. Poco a poco conseguimos la fórmula para encontrarnos cómodos sobre el escenario. Normalmente siempre intentamos conseguir una forma circular, en torno a la batería, mirando a un mismo punto, como concentrando la energía… Se ha ido convirtiendo en un hábito.
¿Os han criticado por no poneros de cara al público?
Cándido: (Risas) Sí, a ti sobre todo (señala a Ángel).
Ángel: Sí, me han llegado a tirar de los calzoncillos tocando (Risas).
Pedro: Es que hay gente que se lo toma como una ofensa, como chulería por nuestra parte. A Ángel sobre todo, porque está de espaldas; nosotros estamos de lado y nos lo dicen menos.
Álvaro: Yo creo que eso también salió un poco de cómo estábamos dispuestos en el local de ensayo. Estábamos más o menos así, nos mirábamos todos y nos acostumbramos a eso.
Esto de la timidez también influye en una presencia muy discreta en RRSS, presencia que parece indispensable en los tiempos que corren…
Cándido: Nosotros tendemos a hacer las cosas según como nos gustaría encontrárnoslas. Obviamente, cuando sigues una banda en Facebook es porque te puede interesar la información que puedan dar, pero tampoco nos gusta ni ser pesados ni que lo sean con nosotros. No nos gusta dar información que no sea estrictamente necesaria. Si vamos a postear, queremos hacerlo con algo que tenga “chicha”, que sea justificado, no una foto por una foto. Para eso ya tengo mi perfil personal. Pero también entiendo que hay gente que entiende la promoción de otra forma distinta.
Para el lanzamiento de “Ulises” no adelantasteis absolutamente nada del disco: ni tracklist ni portada ni single… También os desmarcáis de lo que suele hacer la mayoría en ese sentido. ¿Pensáis repetir estrategia con los álbumes venideros?
Cándido: No sabemos de cara al futuro. En ese momento, como “Ulises” estaba pensado como un todo, nos parecía muy interesante que se conociera todo de una vez. A mí por lo menos me pasa que, cuando a dos meses del lanzamiento de un disco, ya conozco la portada, el tracklist y tengo tres singles adelanto, luego no soy capaz de valorar esos temas de la misma forma; me parece que rompen un poco la dinámica del álbum. Así que intentamos evitar que nos pasara eso. Por otra parte, casi todo el mundo lo hace así, y simplemente nos apetecía hacer las cosas de forma diferentes para llamar la atención. Creo que nos salió bien. Estamos contentos con el resultado.
En cuanto al diseño gráfico de vuestros discos, he visto que siempre son paisajes. ¿Es algo casual o buscado?
Cándido: (Risa) Ahí hay una mezcla de causas. Por un lado, nos gusta tener un control muy grande sobre todo lo que hacemos. Estamos un poco obsesionados con eso. Así que las portadas las hacemos nosotros. Resultaba más fácil coger una foto, editarla y añadirle la parte tipográfica, que crear algo de cero, porque no somos diseñadores. No tenemos esa habilidad. Por otra parte, siempre intentábamos buscar fotos que dieran imagen a la música. Imágenes que pensábamos que podían encajar, salvo la demo, que es simplemente muy visual con una montaña nevada. La de “Flores, Carne” es una ilustración que le compramos a una chica de New Jersey, mientras que la de “Ulises” pretende jugar un poco con la de “Flores…” porque, bueno, veníamos de un jardín lleno de flores, y ahora también tenemos un jardín pero descuidado, como una continuación.
En relación con esto. Cándido escribe casi a diario, y en una entrevista comentabais que antes incluso de que saliera “Flores, Carne” ya había una ligera idea de cómo sería “Ulises”. ¿Tenéis pinceladas de cómo podría ser el tercer disco de Viva Belgrado o ahora solo hay tiempo para la gira?
Cándido: Ten en cuenta que ahora, sobre todo, estamos haciendo conciertos en fin de semana, y entre semana estamos ensayando, tocando y haciendo nuestras cosas. Entonces, sí que hay ideas, pequeños proyectos para este año…, pero no tenemos las cosas tan claras ni tan definidas como para hablar de un nuevo LP.
Con la gira anterior, intentabais aprovechar al máximo la semana, con conciertos, si se terciaba, de lunes a domingo. Ahora, como comentaba Cándido, os centráis sobre todo en los fines de semana, ¿por qué el cambio?
Álvaro: Yo creo que es interesante, porque muchas veces hemos tocado en lunes o martes, en el norte sobre todo, y hay gente que por trabajo o porque el metro cerraba a tal hora no podía venir. Creo que focalizándolo en fin de semana le das más manga ancha al público para que pueda organizarse, no tenga problemas de trabajo o de desplazamiento y pueda venir. Es más por ellos que por nosotros. A mí, personalmente, y supongo que al resto también, me descoloca un poco lo de volver a casa dos días y salir luego tres… No coger la rutina de estar tocando todos los días.
Cándido: También es que antes estábamos estudiando o trabajando. Entonces, si girábamos teníamos que organizarnos y concentrarlo todo en un periodo de unos 10-15 días. No podíamos estar siempre en la carretera. Ahora estamos solo con el grupo, así que tenemos más flexibilidad.