Neneh Cherry – Blank Project (Smalltown supersound)
En los últimos tiempos, comprobamos como artistas con una carrera dilatada, están brindando algunos de los mejores lanzamientos musicales año tras año: sirvan, a bote pronto, como ejemplo los últimos trabajos de Nick Cave, Swans o PJ Harvey.
Sinceramente, no creo que el nuevo disco de Neneh Cherry, Blank Project (14), esté a la altura de los mencionados, pero sin atisbo de duda, estamos ante una notable exhibición de talento que sumar a las indicadas.
Ser consciente del entorno cultural contemporáneo que le rodea, es la base fundamental para que un artista sea capaz de seguir ofreciendo una propuesta actual, creativa y estimulante; Eso, junto al hecho de tener aún activado el chip de la inquietud por el conocimiento y dejar patente la influencia o el poso que ha dejado su carrera en la de otros.
Estos requisitos se cumplen a la perfección en la propuesta de la sueca. Por un lado, cede los controles de producción y texturas sonoras a la sabia mano de Four Tet, uno de los nombres clave para entender la electrónica actual más sugerente. Sabedor del candor sutil y personal de la voz de Neneh, su aportación es clave para resaltar inteligentemente sus virtudes inherentes, con resultados fértiles que van desde el minimalismo esquelético de «Across the water», a la inquietante estructura de la obsesiva «Everything».
Igualmente, se abre a colaboraciones como la de su compatriota Robyn en «Out of the Black», un tema de marcado acento electropop. Sin embargo, es a través de los temas que evidencian su marcada influencia en el ya lejano trip-hop la que aporta los momentos a retener: el infalible latido vivo de «Blank Project», el saturado desarrollo de «Weightless» y, sobre todo, la batería de detalles rítmicos que atesora la sensual y misteriosa «Naked».