Orenda Fink + Thayer Sarrano – C.C. Matadero (Huesca)
La norteaméricana Orenda Fink iniciaba en Huesca su actual gira peninsular, presentando en directo las canciones de su último (y magnífico) disco hasta la fecha, Blue Dream (2014), publicado el pasado año. Antes de unirse a la banda de Fink, Thayer Serrano ejecutó un pequeño set de veinte minutos en el que, armada únicamente con guitarra, seleccionó algunas de las canciones incluidas en el que es su único álbum hasta la fecha, el recomendable Lift Your Eyes To The Hill (2012). Un bonito y coherente aperitivo, por momentos deudor de Mazzy Star, que señalaba inequivocamente el rumbo de la velada.
Acompañada del finísimo guitarrista Greg Elsasser y la propia Serrano como teclista y segunda vocalista, Orenda Fink tomó el escenario para compartir, a lo largo de apenas una hora, una actuación bellísima, de extrema delicadeza en sus formas pero intenso calado. De alguna extraña manera, el trío equilibra a lo largo de su interpretación la femineidad de Cat Power con el misterio de Beth Gibbons y la honestidad desgarradora de la Patti Smith más poética, hasta conseguir una personalidad propia que tiene mucho de cinematográfico. Pasajes que se deslizan suavemente ante el oyente, al tiempo de convertirse en torrentes emocionales de profundidad y gran preciosismo, en los que la complicidad y entendimiento entre músicos resulta indispensable. Un complot concretado en las excelentes maneras de Elsasser a su instrumento y el acompañamiento vocal de la telonera, ambos flanqueando con ciega fidelidad a la artista principal. La música surge así de la propia sinceridad artística, generando un contagio que levanta sentimientos al paso de temas tan sugestivos como “Ace Of Cups”, “You Are A Mistery” o “You Can Be Loved”. A pesar de contar ya con tres discos en su casillero, Orenda Fink es un tesoro semidesconocido en nuestra geografía: tierna, hipnótica, encantadora y brillante, además de poseedora de la magia necesaria para convertir sus conciertos en un acogedor manto con el que cubrirse durante un maravilloso espacio de tiempo.
