Robyn Hitchcock – Shufflemania! (Tiny Ghost Records)
Al gran Robyn Hitchcock le contemplan ya veintidós discos, casi nada. Ha formado o intervenido en diversas bandas y todas ellas espléndidas, ha colaborado en multitud de proyectos, y sigue tan campante. Es ver la portada de este Shufflemania! (Tiny Ghost Records, 2022) y esbozar una sonrisa. El londinense parece estar pasando por un muy buen momento en su vida, y eso lo refleja en esta portada, hortera a más no poder, pero que refleja ese estado anímico a base de una psicodelia de colores chillones y su gato en formato king-size mirándonos y pensando que el pobre animal solo pasaba por ahí.
Hitchcock dice que este álbum es el más alegre de toda su carrera, y es el que se ha sentido más seguro de hacer, y para ello se deja aconsejar por buenos amigos: Pat Sansone de Wilco, Johnny Marr, Erick Slick de Dr. Dog y Davey Lane se encargan junto a él de la parte musical. Pero ante todo está la sabiduría y la intachable maestría del fundador de los The Soft Boys.
Aquí encontramos diez temas que lucen como diez soles. Música atemporal, que no necesita aditivo alguno para sonar ya clásicas, porque yo me atrevo a decir que este es, sin duda, uno de sus mejores discos de toda su carrera. ¿Exagerado? Quizás, pero déjense encandilar, y luego hacemos en ranking.
“The Shuffle Man” parece un homenaje al primitivo Rock & Roll, y es que a mí me llegan ecos del “Louie Louie”, aunque también de los The Beatles más primigenios. Ya sabemos de la fijación que tiene este hombre por la dupla Lennon/McCartney y eso es bien.
Una suave psicodelia va envolviendo “The Inner Life of Scorpio” con colaboración de Marr en algunos instrumentos. De su viaje a México para ver el templo maya del dios de la fertilidad, la luz, y el conocimiento, Quetzálcoatl, sacó la inspiración para “The Feathery Serpend God” en donde narra esa alegría de vivir en la que se inmerso en este momento.
La herencia dylaniana surge resplandeciente en “Midnight Tram To Nowhere”, una gema folk en la que nuestro hombre siente la necesidad de perderse por esos mundos de dios sin destino alguno.
Una de las perlas más hermosas del álbum es “Socrates In Thin Air” en la que a ritmo de pop mayúsculo, muy heredero de Lennon. narra de forma jocosa las tribulaciones de un Sócrates que tiene que lidiar con la imbecilidad de la mente humana. Un toque de cine negro parece asomar de las delicadas notas de “Noirer Than Noir” con un precioso vibráfono de fondo.
“Respect the dead/You will be joining them soon” son los versos que abre la excelsa “The Man Who Loves The Rain” con el apoyo a los coros de su pareja Emma Swift, en un tema que tanto me hace recordar a Neil Young como a Low. De la tranquilidad al nervio powerpop a lo Kinks de “The Sir Tommy Shovell”, mientras que “The Ranging Muse” es como poner a John Lydon tocando honky-tonk. Cierra esta obra maestra la beatliana “One Day” (“one day the ugly truth will be made over to beauty”) con unas armonías dignas del Pet Sounds.
Escucha Robyn Hitchcock – Shufflemania!