The Blow Monkeys (Sala Wolf) Barcelona 11/05/23
Fue como si nos propulsaran al pasado: bienvenidos a los ochenta. En la espera a que salieran al escenario los The Blow Monkeys se podía escuchar música a todo trapo de Chris de Burgh, Madonna, Spandau Ballet, el primer Prince, OMD, así una larga lista que parecía sacada de Kiss FM o de la lista de difusión de alguna suscripción premium a plataformas digitales.
La sala no se llenaba, y por esas cosas de los promotores de conciertos que buscan hasta el último minuto que la cosa se anime, el grupo de Dr. Robert salió al escenario con media hora de retraso. La imagen de Robert Howart está asociada a una estética glamurosa que se reflejaba en los estilosos sonidos del sophisti-pop que ellos fueron uno de los abanderados con sus excelentes primeros tres discos –Limping for a Generation (1984), Animal Magic (1986), y She Was Only A Grocer’s Daughter (1987)-, para después desaparecer de la industria pop y retornar en 2008. Las canciones de The Blow Monkeys son un irresistible catálogo de blue-eyed soul bien sazonado de vientos y harmonías de ensueño no aptas, en ocasiones, para diabéticos.
El concierto se podría resumir en una puesta en escena de una profesionalidad incosteable. Un grupo que destila un sonido musculoso, y que sabe reescribir algún que otro tema tirando del blues o del rock más o menos convencional. Los que allí estábamos esperábamos ansiosos piezas estupendas como “It Doesn’t Have to Be This Way”, “Diggin’ Your Scene” o “Wicked Ways”. Todas sonaron algo frías porque Dr. Robert no es que sea un frontman especialmente comunicativo con el público. A pesar de esta cierta desgana, dio más de una vez las gracias al respetable y, con tono irónico, dijo que ellos son conscientes de que no son de interés para el festival de festivales estivales de España, pero se conformaban con el amor de les profesan los fans de cualquier club que tiene a bien acogerlos. Lealtad y ser conscientes de que su tiempo ya pasó son actitudes artísticas que no son tan fáciles de ver.
Del último disco de la banda –Journey To You (2021)- tocaron la bonita “Time Storm”, “More Than A Miracle”, y de versiones sabe mucho Howart, y se sacaron de la manga una esmerada “You Don’t Own Me” de Leslie Gore. Salimos a la calle. Enfrente hay un tanatorio y dos chicas se fumaban un porro.