Velvet Revolver – La Riviera (Madrid)
Tal vez no sea del todo cierto, pero el principal atractivo de esta banda no es quiénes son y lo que hacen, sino quiénes fueron y lo que hicieron. Así que, para muchos, el pasado viernes lo importante era ver a Scott Weiland, ex-líder de Stone Temple Pilots, y a los tres ex-componentes de Guns n’ Roses, el mítico Slash, Duff McKagan y Matt Sorum, que junto con Dave Kushner forman esta especie de supergrupo.
Para esta ocasión no tuvimos la misma suerte que en Barcelona, ya que allí contaron con la presencia de otro de los gunners, Izzy Stradlin. A pesar de ello, está claro que a ninguno de los cinco les faltan tablas y experiencia. Es indiscutible la habilidad de Slash con su guitarra y la madera de frontman que tiene Weiland. Tan sólo la presencia de estos dos personajes invadía el escenario y la sala entera, con sus movimientos, el virtuosismo de uno y el descaro del otro.
Con los primeros acordes de «Sucker Train Blues» se adivinaba lo que venía después. Mucho derroche de energía, potencia y contundencia en todos los temas. «Slither», «Illegal i song» y «Do it for the kids» fueron algunos de los temas de su disco, Contraband(04), que mejor sonaron y más convencieron. Hubo momentos igualmente destacables por el aburrimiento que provocaron, sobre todo cuando la nitidez y la voz del cantante se perdían, ahogadas por exceso de guitarras.
No faltaron, claro, los homenajes a sus ex-bandas. «Used to love her» e «It’s so easy» de los Guns n’ Roses, «Crackerman» y «Sex type thing» de Stone Temple Pilots y la sorpresa final con el «Negative Creep» de Nirvana. Tal vez muchos esperaban a escuchar temas más míticos, pero sin duda fueron cinco momentos memorables.
Catorce temas y un concierto para nostálgicos, sobre todo.