Cuchillo
Intentamos hacer temas que floten más, en los que la guitarra o la batería o teclados agarren la canción al suelo pero nunca del todo. De ahí el rollo hipnótico de Cuchillo
Cuatro años han pasado del debut de la formación barcelonesa, que tantos halagos y buenas críticas dejo a su paso. Tomando impulso con su EP “Duat” en 2010, les llega el momento de asentarse como una de las bandas que más pueden y deben decir en el circuito español gracias a su folk de finas texturas. Hablamos con su voz y guitarra Israel Marco de las claves de su último largo, Encanto (Limbo Starr, 2012).
Os ha quedado un disco muy espiritual, muy conectado con la naturaleza y puede que por ese motivo, menos oscuro ¿Lo percibís de la misma manera? ¿Conectáis mejor con el campo que con una gran ciudad como Barcelona?
La gente se escapa a la mínima que puede al campo, a la montaña o al mar. Las ciudades están llenas de estímulos que a la vez son distracciones que se imponen marcando un ritmo de vida que va en contra de lo natural. La gente busca una salida a todo eso y normalmente la encuentra en las drogas, el arte, en el deporte, o huyendo a la naturaleza. Vivimos unos tiempos en los que sorprendentemente parece que llama la atención que en una canción cantes sobre el mar o el sol cuando Barcelona está bañada por ambos.
Ya en vuestro EP del 2010 “Duat” dejabais aparcado el inglés para volcaros en la composición en español. ¿Cómo vino la decisión de que todas las letras de “Encanto” fueran en castellano?
El inglés es una lengua presente en mi día a día aunque ya no lo uso tanto en mi vida sentimental como antes. Entonces tuvo más sentido hablar de ciertas cosas en inglés, hoy ya no lo tiene tanto. En el primer disco ya había temas en castellano, el Ep Duat fue íntegro en castellano y en este lo natural ha sido seguir en esa dirección. Es un proceso bastante típico en grupos españoles y creo que tarde o temprano es el camino a seguir.
¿Os habías propuesto alguna dirección a la hora de componer el nuevo material? ¿Los que pensaban que seguiríais la línea marcada por “Duat” se han equivocado?
Tras sumergirnos en el inframundo con nuestro EP Duat, nos apetecía un poco de luz, de canciones más directas y de jugar un poco con el formato de canción pop en el que las reglas están un poco más claras. Puede que haya sorprendido a algunos pero eso es bueno y esperamos que vuelva a pasar con el próximo. Cada disco es distinto, uno evoluciona y necesita hacer cosas distintas, sino sería muy aburrido. Hoy en día parece que tienes que seguir el mismo guión todo el rato.
Si en vuestro primer trabajo fue Paco Loco, en este nuevo trabajo tú has asumido las tareas de productor. ¿Cómo ha sido la experiencia de no contar con un “oído externo” a la hora de tratar las canciones?
Carlos Toronado y César Verdú han sido dos personas muy importantes a la hora de tener ese oído externo. Hemos tenido mucha suerte de poder contar con ellos y han sido clave en la producción del álbum.
Carlos lo grabó y estuvo presente hasta el último momento en la fase del mastering. César se subió al tren en las mezclas y también estuvo hasta el final del proceso de mastering. Digamos que lo he producido con Carlos de mano derecha y César de izquierda por lo que han sido clave en el resultado final del disco.
Se ha hablado a raíz de vuestro último disco una conexión con lo mediterráneo, desembocando en unas texturas más luminosas ¿sentís vosotros esa posible influencia?
Pues al haber un tema llamado Sant Pol de Mar, pueblo del Maresme, y ser la banda de Barcelona la asociación es inevitable. Aunque yo soy de San Sebastián y cuando hablo del mar no tiene porque ser necesariamente el mar Mediterráneo.
Por otro lado las influencias musicales están más conectadas con el Mediterráneo más morune, las escalas y percusiones del norte de África. Al final la gente se lía con lo que lee y acaban diciendo cosas que muchas veces se alejan bastante de nuestra realidad, aunque entiendo que cada uno hace sus asociaciones.
Habéis añadido a Henrik Argen como miembro. ¿Cómo se sumo a vuestro proyecto? ¿Su función será más de acompañamiento o también estará relacionada con tareas?
Henrik es amigo desde hace muchos años, conocía bien el proyecto y hubo un día en el que tuvo que entrar a formar parte de él. Fue después de grabar el Ep Duat, queríamos abrir un poco las canciones, no basarlo todo tanto en los loops y Henrik era la persona ideal. Teniendo a un amigo que toca muy bien la guitarra, los teclados y cante de puta madre es difícil no pedirle que toque contigo. En la presentación de Duat ya estábamos los tres y su implicación en la gestación de Encanto ha sido total. Cuchillo somos tres desde el año 2010 aunque la foto oficial como trío haya llegado a la prensa con la hoja de promo de Encanto.
En el concierto que disteis en el Primavera Sound 2012, además de vosotros dos y Henrik se vio encima del escenario un cuarto componente….
Sí, en el disco contamos con la colaboración de Rhys Pyefinch al saxo tenor en «Navega» y Anna Fürstenberg tocando el violín en «La Hierba». Anna ahora está en NY pero Rhys vive en Barcelona y está tocando con nosotros ese tema y otro más en directo. Fue un lujo colaborar con dos músicos de tanto talento en el disco, y poder contar con ellos en directo es un regalo. Rhys es un saxofonista increíble, muy buen amigo y le da un toque sexy a los temas que mola mucho. Estamos esperando a que Anna vuelva a Barcelona para atarle a la furgoneta y llevarla también con nosotros a todos los lados.
Publicado ya vuestro segundo disco, y echando la vista atrás ¿cómo veis el camino recorrido por Cuchillo durante estos años? ¿Era lo qué os esperabais como banda?
Nada es lo que esperas, en general en la vida todo sale de una manera y no es exactamente lo que esperabas. Por eso creo que lo mejor es no esperar nada, sino ir haciendo la cosas que uno cree que tienen sentido en el momento y vivir el presente. Cada disco es una nueva fase y eso es emocionante. Ver a donde nos llevará le quitaría la gracia a todo. Lo interesante es ir descubriéndolo poco a poco y disfrutar del viaje.
Nadie puede negar que vuestro sonido no sea rico en matices, pero el bajo brilla por su ausencia. ¿Creéis que para vuestro sonido no es realmente necesario?
Si pensáramos que meter un bajo es necesario, lo meteríamos. Intentamos hacer temas que floten más, en los que la guitarra o la batería o teclados agarren la canción al suelo pero nunca del todo. De ahí el rollo hipnótico de Cuchillo que con un bajo sería más tierra y menos aire.
En las entrevistas y críticas que he podido leer podría contar más de cincuenta influencias o grupos conectados a vuestro sonido y todos muy dispares. ¿Creéis que resulta algo exagerado?
No tengo opinión.
¿Cómo ha sido el paso de la extinguida Sinnamon a vuestra actual discográfica Limbo Starr?
Pues despedida amistosa y bienvenida más amistosa.
¿De dónde beben generalmente vuestras letras?
De toda la música que escuchamos, de Caetano Veloso, de Lorca, Henirk Norbrandt, mi tío José Félix Méndez, Blake, Marguerite Yourcenar…no sé, no lo tengo muy claro, me pongo a escribir y me sale. Desde luego que escapo del costumbrismo, tiendo más hacia lo trascendental y soy muy emocional.
¿Sentís vuestro sonido ligado de alguna forma a otros grupos de la península ibérica?
Puede que con nuestro amigo Dotore estemos ligados de alguna forma ya que tocamos juntos de niños y tenemos cosas en común con respecto a nuestra música y hay un sentir parecido que se puede ver reflejado en algunas canciones a veces. Con Joan Colomo o con Remate también creo que compartimos algo.
Vuestro primer álbum alcanzó los primeros puestos en gran parte de los medios musicales del país. ¿Notabais que estabais creando algo de envergadura tal?
Para nada, ni con el EP ni con este disco. Cuando estás creando no piensas en eso, estás a lo que estás.
Y por último, resuélveme una duda ¿Qué hay en “Sant Pol del Mar” (canciones 4 y 9 de “Encanto)?
En la canción queda bastante claro lo que por lo menos en aquel momento hubo en Sant Pol De Mar: Un Encanto.