Él Mató a un Policía Motorizado (Movistar Arena – Inverfest) Madrid 26/11/25
Qué bonito es comprobar que en este mundo repleto de likes, algoritmos, trending topics y demás fanfarria sigue habiendo hueco para la vieja escuela. Mientras multitud de artistas y bandas se dan a conocer a la velocidad del rayo, llenan pabellones y festivales sin apenas tablas en directo y tal cual llegaron se deslizan por el camino de la indiferencia. También siguen existiendo otra vías para hacer sold outs en recintos grandes y recibir el reconocimiento del público, como es el caso de los platenses Él Mató a un Policía Motorizado, quienes pasito a pasito, con tesón y talento, van asentando su base de seguidores de manera orgánica, con un crecimiento tan sólido como sostenido consiguiendo multiplicar su alcance y trascendencia armados únicamente de un magnífico repertorio cocido a fuego lento y muchos kilómetros a cuestas.
Por eso que su presentación en el madrileño Movistar Arena dentro del ciclo Inverfest se saldara con un rotundo triunfo tiene mucho de justicia y reivindicación, con la pista del mítico recinto prácticamente llena y un público entregado a la causa. Un concierto que suponía el fin de la gira de presentación de Súper Terror (2023) -del que sonaron ocho de sus diez temas- pero que mostró todas las facetas del grupo, con paradas en prácticamente toda su discografía, sin necesidad de más apoyo para epatar que unos modestos audiovisuales proyectados en una gran pantalla que cubría la parte trasera del escenario.
Arrancaron con un par de clásicos como “El magnetismo” y “Sábado”, que dieron paso a “Un segundo plan”, uno de los mejores temas de Súper Terror, luciendo más músculo que en el álbum gracias a unos bajos saturados hasta el límite. Quizá esa búsqueda de los límites provocara los problemas de sonido que arruinaron “Más o menos bien” y sobre todo la sutil “La noche eterna”, en la que parecía que alguien estuviese pisando los cables. Por suerte no hubo más problemas hasta el final, y pudimos vibrar con una versión muy planetera de “Moderato” con esos teclados tan propios de Banin en primer plano, así como con “El tesoro”, coreada y celebrada con el gran hit que siempre ha sido, condición que me atrevería a decir que también le corresponde a “Medalla de oro”, cumbre indiscutible de Super Terror, cuya parte instrumental final nos puso el vello de punta a más de uno.
No faltaron “Coronado”, inmejorable muestra de la nueva faceta más electrónica de los argentinos, la siempre estupenda “Yoni B”, canción por la que no pasan los años, una minimalista y misteriosa versión de “Excalibur” que flotaba sobre teclados muy dark o la poderosa recreación junto a La Bien Querida de “El mundo extraño”, en la que no quedó una garganta en silencio en todo el pabellón. Tras una hora y cuarto de concierto abandonaron el escenario para volver con un generoso bis donde aún cupieron la intensidad de “El Universo” y “Fuego”, una inesperada pero muy apañada versión de “Estos últimos días” de Los Planetas y la traca final con “Ahora imagino cosas” (más imprescindible a cada concierto que pasa), “Chica de oro” y “Mi próximo movimiento”. Tras una intensa ovación todavía volverían para un segundo bis, en el que se despidieron definitivamente del entregado público madrileño con “Amigo Piedra”, canción de su primera época que puso el broche de oro a una actuación que seguro que tanto banda como seguidores tardaremos en olvidar.
Foto Él Mató a un Policía Motorizado: Sergio Alberto (Facebook de la banda)

