Fiery Furnaces – Blueberry Boat (Rough Trade)
Desde la apasionante aparición de The White Stripes, muchos son los que se animan a facturar rock a dúo, demostrando que la energía no tiene nada que ver con que el escenario lo pueblen un grupo de cuatro o cinco miembros (masculinos normalmente). Con dos, un chico y una chica, es suficiente. Y con un poco de electrónica, como Fiery Furnaces, aún más.
A través de un cierto apego a lo clásico, a los iconos más transgresores del rock de los setenta (Who, Rolling Stones), y mezclándolo con delicadas líneas de pop sintetizado, Fiery Furnaces, los hermanos Eleanor y Matthew Fiedberg, acaban por cabalgar en un territorio inaudito. Lo suyo suena a sutil y delicado, en una propuesta que arranca preciosos juegos de rarezas sacadas de un sinte, con pasajes vocales anárquicos, propios del Mike Jagger de Exile On Main Street, por ejemplo.
Los desvaríos del disco les sitúan en uno de los territorios más experimentales e interesantes dentro del pop, aunque acaban por hacerse muy pesados (el disco dura setenta y seis minutos). Violines, pianos, sampleos y demás, de los que se sirven para facturar una música que gustará a los que buscan algo más, dentro de los límites de lo reconocible, pero que aburrirá al resto. Por lo menos, son valientes y buscan salirse de los esquemas.