Sleaford Mods (La Riviera) Madrid 03/11/23
Cuando, el 26 de marzo de 2022, Sleaford Mods reventaron y pusieron patas arriba la madrileña Sala But (ahora rebautizada como La Paqui) con motivo de la presentación del espléndido “Spare Ribs” (Rough Trade, 21), era evidente que su siguiente visita a la ciudad tendría como parada La Riviera, en ese salto habitual de aforo que asumen los artistas a medida que escalan peldaños de popularidad. La profecía se cumplía poco más de año y medio después de aquella inolvidable velada, y la dupla formada por Andrew Fearn y Jason Williamson regresaba a la ciudad para estrenar emplazamiento y defender en directo los temas de su último álbum, el de nuevo destacable UK Grim (Rough Trade, 23).
Se presumía noche interesante, por tanto y atendiendo a los antecedentes, pero todo iba a comenzar a torcerse tras la muy interesante presencia de la también británica LoneLady como artista invitada, que apostó sobre todo por los satisfactorios temas incluidos en su disco de hace ocho años Hinterland (Warp, 15). Para empezar, la sala lucía buen aspecto, pero sin colgar el ansiado cartel de “entradas agotadas” (y con no pocos presentes pasando bastante de la actuación), así que, cuando el dúo salió al escenario no fue difícil comprobar que la ardorosa intensidad y agresividad lucidas en su anterior visita resultaban, en esta ocasión, sensiblemente menos marcadas. Quizá fuese porque el efecto sorpresa ha ido disipándose con el paso del tiempo o porque les favorecen las distancias cortas, propicias cuando de acoger su candente propuesta se trata. O pudiera ser, simplemente, que los de Nottingham no tuviesen la mejor de sus noches. Pero, en uno u otro caso, la idea de que venían funcionando con el piloto automático flotaba en el ambiente. Una sensación extendida también a un público al que le costaba entrar en calor (muy lejos de la agresividad mostrada en la mencionada But), mientras los ingleses ofrecían un concierto sencillamente correcto, sostenido sobre las propias peculiaridades de su música. Las mismas que en realidad no son pocas y que, de un modo u otro, fueron arrastrando al oyente a terreno propio.
La fórmula de Sleaford Mods es, en realidad, tremendamente básica, casi primitiva en su manifestación sobre las tablas. Fearn se limita a lanzar la base pregrabada del tema en cuestión desde su portátil y bailar por todo el escenario, mientras Williamson ejerce en su papel de macarra con pinta de acabar de llegar de Magaluf. Sucedió que este último se mostró más domesticado que de costumbre, con repertorio limitado de poses y bailes y, en definitiva, menos desafiante. Y, pasa, que así el invento palidece ligeramente. Fue a partir de los tres cuartos de hora y con “Mork n Mindy” ejerciendo como punto de inflexión, cuando el asunto parecía pillar impulso definitivo, mantenido después con piezas del tipo de “Dlwhy” o “So Trendy” y apostillando (ahora sí) con solidez y presencia esa mezcolanza de post-punk, hip hop, new wave y punk a secas. Un subidón efímero, ya que mientras sonaba “Nudge It” alguien tuvo a bien lanzar una bandera o pañuelo de Palestina al vocalista, quien paró la actuación y abroncó al (o la) responsable, advirtiendo de que no debía volver a suceder… antes de devolver el objeto en cuestión. Minutos después (y tal y como cabía esperar en un ambiente ya caldeado) la escena se repetía, Jason Williamson tiraba el micro al suelo en mitad de la canción y abandonaba el escenario. Las luces se apagaban y lo siguiente que acertamos a ver fue a Fearn recogiendo su instrumento de trabajo, mientras una relativa lluvia de vasos comenzaba a caer sobre el escenario. Se confirmaba que, tras unos ochenta minutos, el concierto había llegado abruptamente a su fin.
El combo justificaría su espantada en redes, apuntando que evitan tomar parte en un conflicto bélico que lamentan pero que reconocen no entender del todo, algo que no deja de resultar chocante dado su habitual posicionamiento socio-político. La realidad es que (casi) en ningún momento se les vio especialmente cómodos o motivados, y el asunto no parecía tan grave como para propiciar esa cancelación prematura en el último tramo de la actuación. En cualquier caso, es evidente que Sleaford Mods no estuvieron a la altura de su currículo, ese que incluye siete álbumes y conciertos arrasadores de los que salir bañados en sudor. Lo cierto es que, a su cacareado paso por orillas del Manzanares, ofertaron bastantes menos nueces de las previstas.
Foto Sleaford Mods: Blanca Orcasitas
punkis de chichinabo
Pues qué vergüenza y poca profesionalidad.
Además de repugnante por su parte, suena a excusa para irse pronto a casa.
Estaba disfrutando mucho el concierto, estaba en primera fila, en un momento dado ,una chica despliega la palestina dándonos empujones y tapando a los que estabamos cerca.
empezó ya mal…se lo lanza a la cara…mal, Jason le dice lo que sabemos, los que estábamos cerca le intentamos decir a la tia que lo respetara, la colega tenía ganas de imponerse, iba bastante pasada y no invitaba a que siguiéramos pasándolo bien.
lo lanzó dos veces más, después de la advertencia, a la tercera se fueron.
Me pareció que era lo justo. No era el momento, ni el lugar y mucho menos con una intención de joder al personal. Hacia mucho que no le decía a alguien GILIPOLLAS tres veces en su cara.
La colega llegaba a sonreír…había conseguido lo que quería..cortarnos el rollo a todos.
Ahora les admiro más, hicieron bien en marchar.
Fui testigo de lo que pasó. Una progre estúpida, que se dedicó a molestar a todos con su rollo pro palestina de pacotilla. Como el postureo progre es muy exigente, por más que la dijimos que parara, ella continuó hasta que consiguió que esto pasara.
Lo que de verdad resulta chocante es que la que firma el artículo saque como conclusión que Sleaford Mods se tengan que posicionar en un lado u otro. La inquisición progre… como es habitual.
Tomaron la decisión correcta. Espero que “la petarda de la Palestina” se haya recuperado del pasote que llevaba, imagino que consumió de más debido a la preocupación por lo que está pasando en Gaza.
Bien por Sleaford Mods!!!
Lo que de verdad resulta chocante es tu escasa capacidad de comprensión, si te parece que en mi texto estoy diciendo que el grupo deba posicionarse de uno u otro lado. Aunque es evidente que no has leído con mucha atención, cuando dices «la que firma el artículo» 😉 Venga, un abrazo.
Qué bueno escuchar a alguien que cómo yo, vivió la historia en primer plano y sabe de lo que habla. Estoy contigo.
Un saludo
¿Le habrán contado a este retarded que Sleaford Mods son aún más progres que la progre?
Siempre tiene que haber un lumbreras que sepas más que los demás, que sepa de todo, que opine de todo… pura ignorancia.
Estuve allí y sé lo que vi.
“…algo que no deja de resultar chocante dado su habitual posicionamiento socio-político. La realidad es que (casi) en ningún momento se les vio especialmente cómodos o motivados, y el asunto no parecía tan grave como para propiciar esa cancelación prematura en el último tramo de la actuación.“
La superioridad moral de los listillos progres. Decidís lo que está bien y lo que está mal. Y si no os aplauden os enfadáis.
Venga, un abrazo!
Si no cortas la parte anterior del texto, casi mejor, graciosete 😉 Pero te lo explico igualmente: lo que no deja de llamar la atención es que ellos dijesen en RRSS que no entendían el conflicto (que es lo que has cortado porque te convenía…), cuando supuestamente son un grupo muy posicionado políticamente. Eso es lo chocante, no lo que pasó en el concierto. Es como si Valdano, un día dice que no entiende un partido de fútbol, así para que lo entiendas. En ningún momento la crónica dice (ni insinúa) que deban posicionarse de ningún lado, si ves eso, o entiendes muy mal o estás algo obsesionado con tu propia postura ¿Me parece que el lanzamiento de un pañuelo (sea de Palestina o sea un puto Clínex) no es motivo para abortar el concierto? Pues sí, me lo parece: apartas lo que te han tirado (insisto, sea la bandera de Albacete o una bufanda de ganchillo), no lo devuelves a la coñazo de tía esa que solo quería llamar la atención y joder el bolo, ignoras a la susodicha y sigues adelante. Es el único juicio que me permito hacer, como espectador, de todo este asunto (solo faltaba que no tuviera ese derecho) ¿Y que no tenían su mejor noche? Pues eso resultaba obvio si los has visto más veces. De tu manido juicio de valor sobre mí (y mis supuestos ideales) ni hablo porque eres muy pero que muy poco original. Otro abrazo para ti… y suerte 😉