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Florent y yo – Florent y yo (El Volcán Música)

De un tiempo a esta parte los seguidores de Los Planetas nos hemos ido acostumbrando a su ausencia. Citando a la señora Cospedal, parece que estemos asistiendo a una disolución en diferido de la mítica banda granadina. Si bien es cierto que salvo en un esporádico episodio en 2012 nunca se ha puesto sobre la mesa públicamente su posible separación, la realidad nos muestra que sus integrantes están más centrados en aventuras paralelas que en el propio proyecto planetero. A la lista conformada por Los Pilotos, Los Evangelistas, Fuerza Nueva, Grupo de Expertos Solynieve… hay que sumar el proyecto en solitario de J musicando el archivo visual doméstico de Iván Zulueta, del esperamos ávidamente novedades discográficas, y la referencia que ahora nos ocupa, el debut en solitario de Florent Muñoz, guitarrista principal y miembro fundador de la mítica banda. Aunque el alias Florent y yo lo haya venido utilizando durante los últimos lustros para enmarcar sus sesiones como DJ -muy recomendables, por cierto- hasta este álbum homónimo nunca había editado material original bajo su propio nombre.

Para este estreno opta por rodearse de personal completamente ajeno a la banda, con Carlos Díaz como acertado coproductor, pero esta circunstancia no impide que la sombra de su sonido se disipe del todo, algo lógico por otra parte. Florent es el responsable principal del instrumento que más enraizado está en la música de Los Planetas. La ejecución de sus riffs y su forma de componer, tan sencilla visceral y personal, son la espina dorsal el sonido clásico de la banda y aquí también se dejan senttir. Pero aparte de estos pilares reconocibles, las canciones que encontramos en este debut amplifican claramente a nivel de producción el libro de estilo al que nos tienen acostumbrados Los Planetas, dotando a sus diez canciones de una variedad y un colorido mucho más profundos. Más allá de la diversidad estilística de las piezas, lo que también hace ganador al conjunto es la frescura que destila. Contaba Florent en una reciente entrevista a El País que mostró este conjunto de canciones a J cuando estaban proyectando lo que finalmente sería Las canciones del agua, fallido último álbum de la banda, y que este las rechazó porque ya tenía el concepto del disco en mente. Visto con perspectiva tengo la sensación de que cometieron un grave error. Apostaría una mano a que estas canciones trabajadas en el Refugio Antiaéreo superarían con creces al cancionero que finalmente compuso aquel disco. De hecho, si hubiera que ponerle un ‘pero’ a este álbum sería el escaso registro vocal de Florent, a lo que se sobrepone con una producción vocal heredera de sus admirados Spacemen 3, con versos que flotan etéreos sobre las capas de sonido que se van acumulando. Con este mismo enfoque J ha construido una carrera, salvando precisamente esa misma limitación vocal y seguro que en su voz este disco sonaría a gloria.

Más allá de este pequeño detalle, el conjunto es realmente excelente. Diez canciones sin relleno donde los momentos más refulgentes se encuentran al comienzo y a final de la galleta. “Aquí paz y gloria” es lo mejor que podríamos haber imaginado que entregaría Florent a priori. Una canción con personalidad propia, rica en guitarras, teclados y melodías. Un cruce entre Los Pilotos y Los Planetas pero cuya síntesis suma y se convierte en algo totalmente diferente a lo presupuestado. Candidata a canción nacional del año. Por su parte, “El silencio” cierra el álbum como la enésima reformulación del rock mesiánico que solo los granadinos saber ejecutar. Se va cociendo a fuego lento para cerrar el LP con el brillo de los paraísos artificiales que tan bien conoce el guitarrista. Entre medias, van desfilando joyas de todo tipo. A destacar los ecos a Deerhunter de “Los restos del naufragio”, el clasicismo pop de “Será para ti”, la magnífica letra y desbordante energía de “Apaga el móvil”, y la potencia de “La cueva de mis fracasos” y, sobre todo, “Un buenísimo plan” que salvando las distancias recrea el imaginario sonoro de “Cumpleaños total”. Respecto a las letras, sin buscar el virtuosismo dialéctico que no parecen pedir estas canciones, funcionan desde la sencillez y la honestidad cantando sin tapujos sobre sus asuntos haciéndote creer que estos pudieran ser los tuyos. Resumiendo, la mejor entrega de universo Planetas desde Zona Temporalmente Autónoma (2017).

Escucha Florent y yo – Florent y yo

 

 

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