Suuns (La 2 de Apolo) Barcelona 02/11/2018
Los canadienses Suuns nos debían una visita en formato pequeño después de ponernos los dientes largos hace un par de años en el Primavera Sound. En marzo estrenaron su cuarto largo, Felt, la excusa perfecta para venir a demostrar si en las distancias cortas son capaces de construir la misma atmósfera oscura y siniestra que en sus primeros discos y ver cómo encajar las nuevas canciones ahí. Canciones que, aunque sigan siendo complejas piezas de ruidismo matemático, se han liberado de buena parte de la gravedad que caracteriza a los de Montreal.
Compartir día de concierto con Spiritualized no sería la mejor de las casualidades: la 2 de Apolo se presentaba bastante desangelada para cuando salían al escenario. Aunque a ellos no pareció importarles: la apertura con “Red Song” y “Baseline” les sirvió para extender su manto sonoro y abrazar al público en una atmósfera sofocante y oscura en la que desplegar un setlist con (casi todas) sus mejores canciones. Y teniendo en cuenta que son una de las bandas más en forma de los últimos años, la lista es ciertamente impresionante.
Sonando mucho menos contenidos que en disco, Suuns cambiaron los arreglos detallistas de las grabaciones por el derroche sonoro, un caos de math rock jugueteando con post-punk. “Translate” sonó eufórica y arrolladora; “Powers of ten” y “Pie XI” aún más góticas; “Paralyzer” acabó convertida en una rave. Siempre con Ben Shemie escupiendo las letras tras el micro y Liam O’Neill impecable a la batería, y parapetados en su semioscuridad de colores y un sonido enérgico y brillante.
Inevitablemente, el momento culminante llegaría con “2020”, ya convertida en mítica, y en la que Suuns se recrearon con el beneplácito de los que asistíamos dichosos a un concierto impecable. Finalmente, hora escasa de set (si tuviera que poner una pega….) que remataron con un bis, que más pareció una hipnótica jam que un bis, y la confirmación de que Suuns, efectivamente, son una de las bandas más interesantes del momento.