Asian Dub Foundation
Vivimos en uno de los países más racistas del mundo
Abanderados de la cultura asiática en el Reino Unido y una de las bandas más interesantes de la última década, en esta visita a España parecieron confundir a los periodistas con enemigos más que como, en la mayoría de los casos, fans.
De dónde venimos
Empezamos a hacer cosas juntos en una organización que se llama Community Music en la que trabajábamos en la educación de jóvenes asiáticos. Formamos el grupo en el East End de Londres en 1993, cuando una persona llamada Quddus Ali fue atacada por el British National Party (partido de ultraderacha británico). Enseñamos a los chicos de nuestra comunidad a perder el miedo a expresarse libremente. Venimos de Londres, pero desgraciadamente vivimos en uno de los países más racistas del mundo y es algo que tenemos que expresar en nuestras canciones. La sociedad tiene que aceptar que somos parte de ella y que somos igual de británicos que los demás. Desde el principìo hemos reivindicado el papel de la música asiática en la cultura británica. Desde finales de los años setenta artistas del Reino Unido han estado haciendo conciertos en Asia, América. Es bueno que haya esa pluralidad porque el resultado es algo más fresco y original.
Esta es mi tierra
La información que se le da a la gente a través de los periódicos en nuestro país sobre la inmigración les deja en una posición muy comprometida. No se les trata como personas y eso no sólo es racista y malo para la sociedad, sino que económicamente es un error porque todas las personas son una fuente de producción idéntica, vengan de
dónde vengan. El dinero viene de muchas fuentes, no sólo de la raza blanca, y cuántos más seamos aportando dinero mejores servivios obtendremos. Nuestros padres pertenecen a la segunda oleada de inmigración en el Reino Unido y nuestra generación todavía no ha conseguido integrarse en el país. La otra parte del problema es que
nuestros líderas consideran que la globalización es algo positivo, cuando es la fuente de muchos de los problemas que tenemos actualmente.
El por qué de las cosas
Se llama Tank y está influenciado por lo que ha pasado en el mundo en estos últimos años. Es una buena mezcla de influencias, algo clásico y moderno a la vez. «Tank» es el título de una de las canciones y nos hace pensar en un conductor de tanque americano escuchando música a todo volumen y dirigiéndose a una ciudad con orden de destruirla. También es una imagen de la antigua Mesopotamia que nos resulta muy parecida a lo que está pasando en el mundo en este momento. Hay una gran diferencia entre la realidad de estos pueblos invadidos y la realidad del ejército americano.
Sus locos cacharros
Siempre hen utilizado la electrónica como parte de nuestro trabajo en el estudio y en directo. Este disco no es más electrónico que los otros, pero puede que en algunas canciones sea más evidente o le hayamos dado un tratamiento distinto. El acceso a la tecnología es más sencillo ahora porque con los portátiles se puede trabajar desde cualquier sitio. Algo que me parece interesante es que siempre estamos abiertos a
remixes. El disco tiene una tecnología que se llama «open disc» y consiste en uns parte a la que se accede con un password y da acceso a canciones que no están editadas. Incluye tres temas que hamos hecho con Chuck D y otros que aparecían en la banda sonora de El Odio. Estos días estamos pensando si podríamos dar la posibilidad al comprador de remezclar nuestras canciones.
Nosotros somos así.
En el nuevo disco las canciones no son ni más ni menos políticas que en cualquiera de los anteriores, porque todo en la vida tiene un contenido político. Lo que no me gusta es que el término en si mismo es casi «despectivo» al referirse a la música. Se supone que es algo para que la gente se entretenga y que debe estar vacío de contenido, pero no es así. Hoy en día hemos llegado a un punto en el que la música tiene letras que no dicen nada y eso va a suponer un problema de aquí en adelante. Las letras en Tank tienen el mismo valor de manifiesto que en nuestros álbumes anteriores, porque siempre han sido una extensión de los temas que nos preocupan.
