Gaerea + Anzv (Sala Panda) Madrid 22/02/24
Madrid, jueves ventoso y lluvioso, el típico día para quedarte en casa. Pues no, los lusos Gaerea venían a terminar la gira Spain Under the Vortex y no era cuestión de perdérselos. Siete menos cuarto de la tarde, tan solo una chica y un señor, ambos con aspecto de “metal-heads” esperan en la puerta de la sala Panda. Se masca la tragedia y comenzamos a comentar que apenas habrá gente en el concierto.
En un alarde de sensatez, la chica – la única persona con dos dedos de frente de pequeña fila – busca bien la información y se fija en que la hora de apertura es a las ocho. Empezamos bien, hemos llegado a la sala casi una hora y media antes de que abran. Había ganas de asistir a este concierto, pero esta vez nos hemos pasado.
Lo cierto es que tenía ganas de ver cómo son en directo Gaerea. No puede ser casualidad que estén en multitud de festivales y que hayan conquistado toda Europa y también Estados Unidos. Para esta gira se han hecho acompañar con sus amigos ANZV, poderoso quinteto de black metal melódico y amigos de rituales en directo.
Uno siempre ha admirado a las bandas que se toman en serio su puesta en escena. Gente que sale al escenario no como si fuesen a comprar el pan, que cuidan los detalles y que tratan de hacer de su concierto un todo perfectamente unido para contar una historia; ANZV son de estos.
Con un pequeño altar en la primera línea del escenario, cada uno de los miembros depositaba una “reliquia”, saludando al ya numeroso público que ya casi llenaba la sala. El quinteto de Oporto está presentando su disco autoeditado – en un formato precioso en la edición de vinilo, por cierto – Gallas. Un trabajo conceptual que explora al ser humano desde su lado más existencial, dando lugar a un viaje atmosférico a la par que trepidante.
Con un punto de apoyo en el Black Metal melódico, su concierto estuvo también plagado de pasajes más atmosféricos e incluso incluyendo influencias del shoegaze, algo que ya hemos visto en otras bandas del género.
Temas como: “Inane”, “Mist”, o “Rituals” sonaron apabullantes y resolvieron una gran actuación en la que no faltó de nada; potencia, show y técnica instrumental. Formación a a seguir muy de cerca.
Desde el momento en el que las luces de la sala se atenuaron, para dejar paso a la iluminación propia de Gaerea, incluido el magnífico y gigante símbolo luminoso de Asmodeo, situado al fondo de la sala, detrás del baterista, se palpó la expectativa de los presentes, ávidos de Gaerea.
Así los cinco enmascarados, con sus brazos también pintados de negro, fusionándose con el escenario y esquivando a las infructuosas luces que trataban de atravesar la neblina artificial, salieron a escena como un torbellino.
Sumergirse en el abismo sonoro de un concierto de Gaerea es mucho más que un concierto de Black Metal al uso. Los cuidados detalles de toda la actuación y los movimientos de cada uno de los miembros, con especial mención al frontman, que no para de moverse, interactuar con el público y tirarse al suelo, te hacen formar parte de todo ello desde principio a fin.
Venían, como comentábamos, a saldar su cuenta de terminar de presentar su último disco, Mirage (Season of the Mist 2022) en la gira propiciada por la promotora Dead Light Music y en eso basó principalmente su estupendo set, aunque con algún guiño a los fans más conocedores de sus comienzos, incluyendo algunos temas más antiguos.
Con una presencia escénica tan cautivadora como su música, fueron tocando temas como: “Urge” este de su disco Limbo de 2020, mezclándolos con otros del mencionado último trabajo, como el muy celebrado “Salve”, “Memoir”, o “Deluge”.
No exagero si digo que el concierto de los portugueses fue una montaña rusa de emociones, una tormenta que arrasó con todo a su paso, pero que, en su núcleo esconde una belleza tan extraña como perturbadora.
Lo que distingue a Gaerea de otras bandas ya no es solo su sonido y un cancionero a prueba de bombas, también el envoltorio en el que presentan todo este artefacto. Giros y aullidos catárticos del frontman, caídas dramáticas y una escenografía perfecta convirtieron su concierto en una obra de arte sonora.
Al reflexionar sobre el concierto, es imposible no reconocer el poder que Gaerea tiene para transformar un estilo musical, que suele caer en los tópicos. Sin duda, el quinteto exhibe una muestra de fuerza, con la que continúan desafiando a los límites del Black Metal, convirtiéndose en unos renovadores indiscutibles del género.
Una pena que, en España, país vecino, Gaerea sigan relegados a escenarios pequeños y que en lugares mucho más lejanos estén triunfando. La vida misma.
Si algún día pasan por tu ciudad, no te los pierdas y acude a saludar con un “We are Gaerea!”, himno con el que acaban sus conciertos.
Fotos Gaerea + Anzv: Fernando del Río