Nacho Umbert
No sé qué decir del éxito, no lo conozco
A raíz de la publicación de su segundo disco en solitario, en Muzikalia hemos querido preguntar a Nacho Umbert sobre las circunstancias de su creación y cómo ve a la industria musical alguien con su privilegiada perspectiva.
Después de terminar con Paperhouse pasaste catorce años sin grabar y ahora sacas tu segundo disco apenas un año después de “Ay…” (2010). ¿Sientes más la sensación de querer recuperar el tiempo perdido o es que cuando se descorcha el champán ya no hay vuelta atrás?
Vuelta atrás no hay, claro. Lo hecho, hecho está, y lo publicado no te digo. Pero el día que deje de disfrutar, o que crea que no tengo nada interesante que explicar, c´est fini.
¿Las buenas críticas que recibió tu anterior disco te han puesto las cosas más fáciles para grabar el nuevo? ¿La gente te devuelve más las llamadas?
Más fáciles no te creas. He sentido el peso de la responsabilidad, aunque crea que es una estupidez. Pero no he podido evitar sentir algo de vértigo al volver a publicar. Las cosas de querer volver a gustar a los que ya les gustó el primero. Algo poco recomendable y algo muy poco predecible. Envidio a los ancianos y toda su libertad para hacer y decir lo que les dé la puta gana. Pero es evidente que con un disco detrás, el acceso a según qué cosas es un poco más fácil. Los medios de comunicación, por ejemplo, te hacen más caso. Respecto al público, ya veremos.
¿Tienes la sensación que se habla más ahora de Paperhouse que de lo que se escuchaba entonces? ¿Hasta qué punto es necesario el éxito para la salud de una banda?
Absolutamente. Te aseguro que en los noventa se hablaba muy poquito de Paperhouse. Aunque bien mirado, sólo había fancines y Rockdelux. Y alguna radio… No sé qué decirte del éxito, no lo conozco.
Después de algunos años alejado del circuito, ¿Cuáles son tus impresiones con el reencuentro? ¿Echas algo en falta de los noventa o envidias a los que empiezan ahora?
Complicado, todo tiene muchas aristas. Ahora es fácil grabar y editar y es relativamente fácil publicitarse por la red. Supongo que hoy es más fácil empezar. Pero el horizonte es muy difuso. No se vende un disco, y no se sabe muy bien hacia adónde vamos.
Antes todo estaba mucho más claro: el objetivo era grabar discos, e intentar presentarlos en directo. En cambio hoy, cada día parece tener menos sentido grabar una colección de canciones y empaquetarlas. Imagino que pronto dejaremos de hacerlo. Me pierdo…
¿La Compañía sigue siendo la misma? ¿Qué papel aporta Refree a las canciones?
Refree es casi la mitad de esta historia, al menos en lo que respecta a la grabación de mis discos. Así que en el estudio él es mi compañía. Refree tiene carta blanca, o casi. El otro día me decían que se notaba la mano de Raül. ¿Y cómo no? No podría ser de otra forma.
En la canción homónima con el disco, “No os creáis ni la mitad”, tú mismo admites la auto-referencia que haces con respecto a tu peculiar trayectoria musical. Menos obvio es que te inspires tanto en tu propia vida en muchas de las restantes canciones. De hecho, parece que muchos temas sean “simplemente” cuentos que te apetece explicar.
La mayoría son cuentos inventados, aunque siempre existe un contexto o una idea que me interesa tratar. El celo por guardar la compostura (“Nuestra especialidad”), la mezquindad en ciertos círculos de la burguesía (“El Sr. Esteve”), el culto al triunfador (“El mort i el degollat”), la dignidad del ser humano sea cual sea su profesión (“La moral distraída”), la pérdida de superpoderes (“Superhéroe”)…
Quizás el nuevo disco suene más “lleno”, incluso un poco más vital. De todas maneras la producción sigue presentando una rigurosa ingeniería instrumental. ¿Has querido dar mayor protagonismo a la banda?
Es que no hay banda. En el estudio la banda somos Raül y yo, aunque al final podamos incluir elementos con los que nosotros no podemos, como la batería. Y para eso nadie mejor que Xavi Molero. Es cierto que en este disco nos planteamos jugar más, e incluir los elementos que cada canción nos pidiese. En este sentido es un disco más sofisticado, menos austero, con mucha más dinámica y continuos anticlímax, algo que nos encanta a los dos.
Todo el mundo que te sigue siempre está de acuerdo en que de alguna manera tus letras les atrapan y siempre las destacan como tu mayor virtud. ¿Dentro de poco veremos al Nacho Umbert escritor?
No sabría ni por dónde empezar.
¿Qué planes tienes para el futuro? ¿Cómo será tu gira de presentación del disco? Si no estamos mal informados uno de tus primeros conciertos será con Owen Pallett.
Mmmhhh, me temo que estáis mal informados. A Owen Pallet lo teloneamos en abril, si no recuerdo mal. De momento tenemos seis fechas para diciembre, la mayoría con banda completa y alguna en formato íntimo, a dúo.
¿Con quién sueñas hacer una canción a medias?
Puestos a soñar, con Pj Harvey. Pero mejor que no flipe. Con Nacho Vegas estaría muy bien.
Trabajas como decorador y te diviertes escribiendo canciones. ¿Qué está peor, el sector de la construcción o la industria musical?
Uy, el sector de la construcción está genial, y el de la cultura no te digo. Escogí un mal día para dejar de esnifar pegamento…