Spectral Lore – III (Autoeditado)
El panorama del metal de estos últimos años está siendo muy fructífero en cuanto a diversidad de sonidos se refiere. Géneros recientes como el post-black o el blackgaze y también la incesante tendencia que han adoptado los músicos en combinar topo tipo de estilos son pruebas evidentes de ello, motivo por el cual es cada vez más habitual encontrarse con discos que suponen un universo sonoro impredecible y único. III de Spectral Lore es uno de esos álbumes a los que hago referencia y en las próximas líneas voy a explicaros el porqué de que sea tan especial.
III es el cuarto álbum de larga duración lanzado este mismo año por la banda de origen griego y el tercero de una saga que empezó allá por el 2006. Está dividido en dos partes, el disco uno contiene cuatro canciones y dura 50 minutos y el disco dos tiene tres temas que se desarrollan a lo largo de 37 minutos. Aparte de la duración de ambas partes existe una fuerte diferenciación entre ellas que las distancia pero no de una manera abrupta, sino con una evolución adecuada y deliberada que el permite al oyente contemplar la obra como un conjunto, un todo en donde el black metal adopta diversas formas.
El disco uno es sin duda alguna la recreación musical de todo aquello que representa lo intenso, lo caótico y lo demencial. Composiciones disonánticas decoradas con voraces trémolos y crescendos imparables. Tanto las guitarras como la percusión se mezclan brillantemente, fusionando un blast beat de extrema rapidez e intensidad con riffs de grotesco sonido, creando una explosión auditiva que nos introduce directamente en un agitado mundo de ritmos acelerados y melodías perturbadoras que; por si fuera poco, no suponen más que una parte de la elaboración a la cual aún tenemos que añadirle dos elementos más, las voces y la distorsión. Como era de esperar las voces contribuyen de forma esencial a la obra. Desgarradoras, profundas y fantasmagóricas, sin ellas el resultado carecería de ese sentimiento decadente y opresor que cubre de locura a este primer disco. Por último tenemos la distorsión, la cual es tan contundente y su presencia tan acentuada que esta se convierte en un factor determinante para recrear la atmósfera ideal que Ayloss (único miembro de la banda) tanto ansiaba conseguir.
El disco dos realiza un giro de 180º y nos muestra una esencia dispar a la del anterior. Mientras que el primero estaba más centrado a expresar emociones y sentimientos negativos, este segundo se decanta por ensalzar melodías armónicas y relajantes pero sin dejar de lado el carácter innato del black metal, ya que en este caso también debemos destacar la increíble rapidez y potencia de las canciones pero con interludios melódicos y bases ambientales que adquieren un mayor protagonismo; sin embargo, este desarrollo no es repentino, sino que «Drifting Through Moss and Ancient Stone» (última canción del primer disco) ya tenía estas características y sirve como preludio al disco dos conectando ambas partes. De forma clara y concisa el álbum evoluciona y quedan marcados el inicio y el final del mismo como polos opuestos.
En términos generales es asombrosa la variedad sonora que ofrece este trabajo y, a su vez, podemos encontrar varias similitudes con otros grupos, como por ejemplo, el interludio triste de «The Veiled Garden» nos recuerda al tema «Avec les forces d´un amour inane» de la banda Au Sacre des Nuits y las guitarras casi expresionistas rememoran el sonido de Krallice; sin embargo, estas comparaciones no empañan el producto, sino que remarcan aún más el nuevo aire de frescura que Spectral Lore otorga al panorama. En definitiva, III no solo es un espléndido álbum de black metal atmosférico y progresivo, sino que se ha convertido en todo un referente que las futuras bandas del estilo tendrán en cuenta como inspiración.