Texxcoco – Disorder (Subterfuge)
El puritanismo que gastan las grandes plataformas mass media hace que, en algunos casos, su cerrazón mental les vaya en su contra. Censurar un video por enseñar el cuerpo desnudo de una mujer en pleno siglo XXI es el signo de los tiempos, pero también la fuerza que ejerce la gente mediante el uso de las redes sociales hace que, como en este caso, se subsanen agravios tan pueriles. Esto pasó con el video de la canción “Velvet love” que aparece en el primer largo de la formación Texxcoco.
Originarios de Las Palmas de Gran Canaria, el cuarteto lleva ya unos tres años en activo componiendo infecciosas píldoras super vitaminadas que les ha llevado a grabar diversos ep’s, y ahora fichar por una conocida disquera indie. Si a todo esto le añadimos que no paran de girar por los festivales más importantes tanto de aquí como de fuera, pues es de tontos no augurarles un futuro más que prometedor.
“Disorder (Subterfuge, 2018), pone sus cartas encima de la mesa a la primera nota que suena, y no engaña a nadie. Es un cancionero contagioso que remite al nervio de grupos comolas Sleater-Kinney (“Crazy mama”, “Lucifernando”). Los pedales a pleno rendimiento, y el riff bien afilado son armas imbatibles, lo sabemos, y así lo demuestran en poderosas descargas como “No control”, o “Thank you for being a whore” en donde la herencia de Dischord se cuela entre las rendijas de una tonada de insatisfacción juvenil. Y sigue la fiesta con “I wonder” y me acuerdo de la vehemencia de las Sibyl Vane (¡aún recuerdo cómo me machacaron el cerebro cuando las vi la primera vez en concierto! Se las echa mucho de menos…), “No beach” podría haberla firmado Courtney Love en sus buenos tiempos, y los pespuntes rítmicos de “Brain eraser” no son obra de Kathleen Hanna, pero casi. Cierran poniendo pisando el freno con la velvetiana “Disorder”, y una “Interludio” que se abre camino sinuosa y acaba atrapandote en su espiral electroestática. Y vuelvo a darle al play. Sigamos bailando.
Escucha Texxcoco – Disorder