Tirzah – Devotion (Domino)
Llevaba Tirzah Mastin editando el’s junto a Nozinja o Mumdance hasta que ha dado el salto a grabar en solitario junto a su amiga, la extraordinaria compositora Mica Levi, y juntas las dos han trabajado mano a mano la mayoría de temas de este sorprendente cancionero. El resultado es un disco monumental en su modestia, de ritmos estáticos, con gran sentido del espacio en una producción rebosante de pequeños detalles que aúpan al disco a cotas inigualables. Este “Devotion” (Domino, 2018) es un disco que debería ser un punto y aparte en el r&b más experimental y audaz. Canciones buenas tiene para parar un carro.
“Holding On”, si ir más lejos, teje una sinfonía, en plan lo-fi, a base de una caja de ritmos y un sintetizador matizada por la poderosa voz de Tirzah. El fraseo de la londinense, como desganado pero tremendamente elocuente, va gestionando a su antojo los silencios entre cada nota en “Affection”, con un piano que le otorga ese cariz ensimismado muy en la linea de un James Blake.
Los sonidos arrancan bombeando bass music, y luego entra en acción un soul de muchos quilates en la enorme “Basis Need” con la que D’Angelo estaría muy orgullosa, mientras “Guilty” esculpe una orografía de contornos para el soul del futuro.
Acompañada de Coby Say en las voces, “Devotion” es una gema deslumbrante de neoclasicismo que parece un cruce entre Julia Holter y Arthur Russell, y en “Say When”, otra vez punteada por las notas del piano, desprende un aura irrepetible. El pódium del año ya tiene a una de los agraciadas.
Escucha Tirzah – Devotion