Entrevistamos a Lolo Rico
«Jamás censuré nada pero a veces me tenía que morder los labios porque pensaba que no nos dejarían emitir»
Casi dos décadas después, y tras el interés mostrado por la Universidad de Alcalá de Henares por el programa televisivo La bola de cristal, se ha suscitado un movimiento de reconocimiento hacia aquella criatura televisiva que vio la luz en 1984 y que expiró en 1988, aunque ha seguido vivo en la memoria de todos los que lo disfrutaron. Ahora aparece un libro de la directora del programa, Lolo Rico, un doble cedé editado por Subterfuge con las canciones de La bola y ocho dvd’s que estarán a la venta en junio.
¿Te esperabas el interés que iba a suscitarse alrededor del programa veinte años después?
Sinceramente, no. Cuando vinieron de la Universidad de Alcalá de Henares a comunicarme que el Festival de la Palabra, que se hace todos los años y que está vinculado al Premio Cervantes, se iba a dedicar a La bola, me hizo mucha ilusión y fue un motivo de sorpresa después de tanto tiempo. Pero luego ha superado las expectativas no solamente mía, sino también de la propia Universidad, porque se ha llenado de público joven que ha participado en las actividades planteadas. Además, la primera edición del libro se vendió en 24 horas.
¿Dónde crees que ha radicado más el efecto llamada, en la labor realizada por la Universidad o en el libro en si?
Creo que el Festival de la palabra ha sido un toque de atención para todos aquellos que recordaban el programa y que lo han transmitido a otras generaciones; ha sido una llamada y eso ha hecho que, a la vez un motivo de reunión como era la exposición en la Universidad o la presentación del libro y el disco haya atraído la atención de los medios de comunicación. Encontrarme a los que fueron telespectadores de La bola de cristal en los lugares donde se han desarrollado las presentaciones para mí ha sido algo maravilloso y también ha sido como un punto de partida. Yo quiero seguir haciendo cosas.
¿Crees que se está siendo respetuoso con el tratamiento que se le está dando a esta retrospectiva?
n estos momentos no lo sé porque no soy consciente de la forma en la que los medios lo están presentando. Si te enseñara mi agenda, verías que están cubiertos todos los días con entrevistas. Estoy archivando lo que puedo, para luego leerlo porque ahora no puedo examinarlo detenidamente. Es algo que espero hacer pronto porque me apetece. Lo que si tengo claro es que cuando todo esto empieza, no puede haber una campaña orquestada detrás para ser instrumentalizada ni la Universidad tenía ningún interés político fuera del estricto reconocimiento y de lo que representó la palabra y la lectura en el programa… De verdad, no puedes imaginarte el afecto que yo he notado del público que ha acudido a estos eventos y gente de medios que manejando la cámara o con el cuaderno en la mano pertenecen a esa generación que veía La bola. Me preguntan en todas las entrevistas lo de ‘que tiene esta bola que a todo el mundo le mola’ y a mí me interesa volver la vista atrás y ver la labor que hicimos todo el equipo para tratar de desvelar esa especie de secreto que sin duda se esconde detrás de La bola porque si no, nada de esto sucedería. Ahora mismo tengo perspectiva del ayer, porque me he obligado a recordar para escribir el libro, pero no del hoy.
Sin duda el único lado negativo de todo esto, por buscar uno, es que durante mucho tiempo has tenido a La bola en pausa y de repente, en un margen de tiempo mínimo, te llega un alud de información que no puedes asimilar de golpe y porrazo…
Sí, pero ahora quiero hacer cosas que tenía en la cabeza y que no salían porque estaba con muchos proyectos pero que han cobrado sentido y fuerza gracias a todo esto. En todo caso, está bien vivir este momento porque podría no haber llegado nunca.
Para preparar el libro, has tenido que apoyarte en las opiniones de gran parte del equipo humano que realizó La bola de cristal porque el ejercicio de memoria ha sido prácticamente cerebral ya que he leído que no tienes los programas grabados ni has tenido acceso al archivo de TVE…
La verdad es que yo creía que lo recodaba todo pero luego he visto que no. En efecto, yo no tenía ni un programa grabado y cuando ha llegado a mí el material audiovisual para hacer la selección de cara a los dvd que se van a vender, me he quedado sorprendida ante La bola de cristal y, claro, he recordado cosas… y es que durante todos estos años no he tenido acceso a algo que yo misma había creado.
¿Y crees que eso es una tara para el libro?
No, no lo creo. Tampoco acudir al equipo ha sido un recurso. Yo entendía que ellos tenían que tener una presencia porque el programa fue labor de todo; una presencia activa. Ayuda casual sí ha sido lo de reunirme con gente que no veía desde hace tiempo pero con los que mantenía una relación cordial y que ha provocado que el recuerdo se intensificase al recordar anécdotas, reírnos de situaciones vividas…
¿Por qué se terminó el programa?
Tras la primera legislatura del PSOE surgieron diferencias de criterios respecto a los contenidos cuyo resultado fue una oferta apetecible de un nuevo programa que unido a mi cansancio tras cuatro años de emisión me hicieron aceptar el fin. Empezar a pelear por todo aquello que habíamos dicho y debíamos continuar diciendo no hubiera tenido sentido y hubiera entorpecido la elaboración de cada entrega.
¿Cómo se va a articular la publicación de los dvd sobre el programa?
Yo he seleccionado material para 8 dvd de 3 horas cada uno. Círculo digital me pidió que dirigiera la selección dentro de los límites que tengo respecto a la técnica y el dvd,. Precisamente, acepté la dirección porque me pareció que si después de tanto tiempo salían 8 dvd, tenían que tener por lo menos el sello de lo que fue el programa. Es imposible que mi labor se refleje al cien por cien con una selección. He hecho una división en la que va a haber programas y aquellas pequeñas secciones que había como las biografías de grandes actores, la historia del cine, lo que hacíamos con cuadros y poemas, las series del Zodiaco y El hombre invisible.
O sea, que para las generaciones que no pudieron verlo va a ser un buen compendio.
Ése es mi deseo porque sería terrible que ahora desilusionara. Otra cosa es que el mito que se ha formado alrededor de La bola de cristal ahora que está a la mano se desmitifique un poco pero bueno, no se trata de crear mitos sino de instrumentos de distracción, de iniciación de no haber sido espectadores…
¿Y qué sabes de la reposición del programa que se está haciendo en Canal Nostalgia?
Prefiero no hablar de eso.
La cometa blanca también la están reponiendo en este canal… ¿Sin ella hubiera habido Bola?
Creo que no. Yo dirigí la última etapa de ese programa y aunque no fue mucho tiempo, por aquella época yo trabajaba en RNE. Por lo que sea necesitaban que La cometa tuviera un giro y me lo ofrecieron y a partir de ahí comencé y seguí trabajando en TVE, sin experiencia televisiva pero con una idea clara: odiaba los programas infantiles convencionales, y no digamos eso que llaman ‘juvenil’, porque no sé qué tienen de juvenil. Yo quise hacer otro tipo de producto y en La cometa sólo se concretó a medias porque era un programa hecho, con un equipo, una estructura y no era necesario cambiarlo. Luego, cuando llegó la oportunidad de La bola, yo ya sabía muy bien lo que quería, en cuanto al espíritu, porque el cómo no tenía ni idea.
¿Has leído el libro de Rafa Cervera sobre Alaska y la movida?
Lo tengo, lo he ojeado pero no lo he leído. ¿Por qué?
Porque parece mucha casualidad que ambos libros se hayan sucedido con tan poco espacio en el tiempo siendo ambos de la misma editorial. ¿No estaba planificado?
No porque yo contraté con Plaza & Janés hace tiempo la elaboración de un libro que se llama Cartas de una madre de izquierdas a una hija de derechas que, por diferentes motivos, aún no ha visto la luz. Y sí había hablado con mi editor la posibilidad de hacer algo sobre La bola, pero en el futuro. Lo que pasa es que cuando apareció el interés de la Universidad, que me comentó que le gustaría hacer un libro sobre el programa, ya todo se precipitó. He tenido que escribirlo a marchas forzadas y la verdad, no lo he leído tras su publicación porque en general, no me gusta leer lo que publico. El defecto que puede tener es que se ha escrito muy deprisa.
El prólogo del libro es bastante agresivo. ¿Crees que se entiende?
El prólogo es de la Bruja Avería y en el programa, ella era así. Jamás censuré nada pero a veces me tenía que morder los labios porque pensaba que no nos dejarían emitir. El prólogo es así de intencionado y el libro en general tiene varios niveles de lectura. Habrá gente que se quede en la anécdota y otros que investiguen las dobles lecturas.
Título: El libro de La bola de cristal
Autora: Lolo Rico
Editorial: Plaza y Janés
Número de páginas: 255
El programa de La bola de cristal se repone actualmente en el Canal Nostalgia de Vía Digital, pero sin ninguna periodicidad ni horario concreto.
Círculo digital editará desde junio y quincenalmente una serie de ocho dvd’s de tres horas cada uno.