Nada Surf – La Riviera (Madrid)
Una cosa tengo clara con Nada Surf: merecen mucho más la pena hoy en día que en sus orígenes. Fue a partir de la publicación de su obra magna, Let go, cuando sus composiciones ganaron un empaque melódico notable prescindiendo del lastre eléctrico de sus dos primeros trabajos. De hecho, el show se centró en sus tres últimos lanzamientos, haciendo hincapié en el reciente y extraordinario Lucky, un compendio de temas que fusionan las armonías vocales y atmósferas de los mejores Teenage Fanclub y Beach Boys.
Abrieron Clovis brindando las poses más sosas y sobadas de un pop presuntamente serio y sensible. Cansinos y abúlicos, nadie les hizo el menor caso.
Con el ambiente ciertamente enfriado por Clovis a pesar del entusiasmo que siempre muestra la audiencia de Nada Surf, el trío llegó a escena confiado con un cuarto miembro de apoyo al teclado.
Desde el inicio la cancha otorgada a Let go fue grandísima: “Hi-speed soul” y “Happy kid” abrieron fuego minimizadas por un sonido horrible donde el bajo y la batería ahogaban cruelmente voces y guitarra. El colmo llegó con un molesto acople de casi veinte segundos en mitad de “Whose authority” que hizo que hasta Daniel Lorca dejara de tocar el bajo y se preguntara qué destrozo era aquello. “What is your secret?” y “Weightless” siguieron sonando opacas y deslucidas, mientras un público de gusto por el garrafón ignoraba lo grueso y burdo de las interpretaciones entre sonrisitas y fotos-happy para los tonti-blogs.
Afortunadamente “Killian’s red” sirvió de revulsivo resultando oscura, intensa y pulida. A partir de ahí, la mejora fue apreciable y las melodías coreadas de “I like what you say” y “Ice on the wing”, la graciosa gansada del baile soul de la gente con “Inside your love” o la belleza intrínseca de “Beautiful beat” y “See these bones” salvó los trastos y dejó en lugar decente la velada.
Un bis reivindicando las virtudes de The weight is a gift con “Always love” y “Blankest year” sirvió de broche y les erigió como banda lo suficientemente valiente y recia como para obviar sin problema “Popular”.