A Contra Blues – Jab (Autoeditado)
Si tenemos que utilizar el término “uno de los referentes del rock-blues en España y también en Europa”, tranquilamente y con toda probabilidad, a la banda A Contra Blues se le podría asignar dicha frase.
Jab es el título del séptimo y rotundo puñetazo musical de Jonathan Herrero (voz y guitarra), Alberto Noel Calvillo (guitarra), Héctor Martín (guitarra, ukelele y coros), Núria Perich (batería) y Joan Vigo (bajo y contrabajo). Los cinco optimizan, en su novedoso álbum, su habitual apuesta plena de raíces norteamericanas, la cual nació ya en 2005.
Consecuentemente, después de los dos primeros LPs homónimos I (2008), II (2010), además de luego En vivo (2012), Chances (2013), R&B. Rarezas y blues (2015) y Heart and guts (2017), la formación afincada en Barcelona completa ahora su diestro heptágono particular con un repertorio de guerrero carácter. El mismo ya despega sacudiendo dos ganchos de derecha como la aguardentosa y bailable “Toxic love” y la galopante “Bad blood”, las cuales rememoran el más añejo rock-blues comentado, aunque el experimentado quinteto coloca una pizca de modernidad.
En otras palabras, Bo Diddley, Jerry Reed, Creedence Clearwater Revival, Allman Brothers o incluso Chris Isaak son algunas de las profesoras bases que han absorbido los propios A Contra Blues, para transportarlas a su fértil terreno y extenderlas una capa de resistente barniz de elaboración propia, a lo largo de este trabajo.
Las hechuras de fronterizo tex-mex aparecen en el tercer corte, “Coyote”, el cual se desliza lastimero, melódico y adecuado para escucharlo en un caluroso atardecer que pueda parecer infinito, con la muy firme voz del «frontman» Jonathan Herrero y la instruida guitarra de Alberto Calvillo liderando este sentimiento descrito. Después, a través “I’ve made my time”, en algún punto entre el country, el gospel y el blues palpita el desgarrado espíritu del combo.
Acto seguido, el rock and roll más cincuentero y primitivo estadounidense es filtrado a través de la indómita “Cimarron”, algo que también se podría aplicar a la jubilosa “Hey Bo!” (ésta última al estilo de “Not Fade Away”, de Buddy Holly) y a la algo “zombie” y desbocada “Machete”. Estos intérpretes catalanes templan, en el momento justo, sus desaforados impulsos previos y es entonces, cuando el caudaloso río “bluesy”, denominado “A crub of kindness”, te baña de modo apacible e intenso, al unísono: es ésta misma una de las zonas más álgidas e inspiradas de todo el rocoso minutaje de Jab.
La esencia sónica de la banda también se transfiere a través de incansables soul y rock sureño en “Maybe tomorrow”, cuyos párrafos parece clamar acerca de romper lazos con la rutina diaria. Más adelante y como si fueran unos presidiarios que huyen a toda pastilla de una cárcel de Mississipi, irrumpe el desatado rockabilly “I’m leaving boy” (¿quizás, tras la senda de Stray Cats?). También prosigue sosteniendo la abundante nervadura del LP, el vertiginoso rock tejano – con un eco de ZZ Top – de “Fail and grin”. Para ir deteniendo el cancionero y dejarlo que vaya cogiendo una azucarada ensoñación de modo gradual, la excesivamente sosegada aunque linda “The silence after the scream”, se encarga de firmar el cierre de tan recomendable LP, grabado éste en los Medusa Estudios de Barcelona.
En definitiva, a ver quién es el que que sujeta a ese bólido de la Nascar bautizado como A Contra Blues, así que lo más aconsejable es disfrutar de la desaforada carrera planteada y que ésta se desarrolle a través de las venas ardientes de los oyentes. Como un motor enrabietado, como una conducción temeraria por un circuito peraltado de Estados Unidos: así rugen los acordes de esta agrupación de la Ciudad Condal, así que saborea su forajida pegada.
Escucha A Contra Blues – Jab