Mark Kozelek – Heliogàbal (Barcelona)

Mark Kozelek (Red House Painters, Sun Kil Moon) es un tipo consecuente con sus ideas y recurrente en sus acciones. Antes solía ser un joven airado peleado con el mundo y ahora es un viejo airado peleado con el mundo. Antes solía hacer canciones hermosísimas con letras desgarradoras y ahora sigue haciendo canciones hermosísimas con letras desgarradoras. Para Kozelek, hombre íntegro, consecuente con sus ideas aunque muy escéptico sobre el futuro, solo cambian, a peor, claro, las circunstancias como ejemplifica cuando nos dice, en la letra de una de sus últimas canciones, que si en los noventa firmaba autógrafos a chicas de veinte años, en la actualidad solo firma pósters a tipos con zapatillas de tenis.
En esta mini gira española que le ha traído por Sevilla, Barcelona y Madrid, Kozelek se deja en casa a su banda actual y se basta con su guitarra para ofrecer un concierto acústico de carácter íntimo. Dejó bien claro al empezar el concierto que cada vez se siente más desarraigado respecto a las canciones que escribió con Red House Painters aunque la gente siga empeñada, como más tarde se comprobó, en pedirle canciones de esa época. Así el setlist se centró en los discos más recientes, tanto en solitario como del repertorio de Sun Kil Moon, y además ofreció un par de temas como avance de su nuevo disco que según afirmó saldría en febrero. Una de estas canciones fue una emotiva confesión sobre que podría vivir sin muchas cosas cotidianas aunque no sin su madre a la que definió como su mejor amigo y la otra fue un tema de aires country que no desentonaría en el «Nebraska» de Springsteen.
Kozelek sigue en un estado de forma impecable, tanto en su técnica vocal, falsetes incluidos, como con su guitarra a la que trata con un cariño especial y de la que saca modulaciones brillantes. El concierto fue de menos a más, empezando algo frío por un formato muy próximo con el público que no encontraba del todo confortable aunque poco a poco se fue soltando, fue alzando la voz, la guitarra cobró más protagonismo y acabó el concierto en lo más alto. Entre canción y canción el público pudo comprobar el carácter sarcástico e iconoclasta de Kozelek, dejando algunas perlas de su filosofía personal que conmocionaron a más de un bienpensante, volvió a rajar sobre Nels Cline, intentó ligar con una chica del público y no mostró gran estima a las mujeres portuguesas. 
Con todo, con todas sus peculiaridades, Kozelek sigue siendo un autor imprescindible. La discreta presencia de Antonio Luque entre el público demuestra que de manera lenta pero segura Kozelek es ya un pequeño mito contemporáneo que solo su aversión a aceptar según qué reglas del juego de la industria musical lo sigue manteniendo bajo el radar mediático. Un concierto que si bien no fue perfecto, sí que volvió a recordarnos a más de uno lo mucho que este señor nos ha dado.

Un comentario en «Mark Kozelek – Heliogàbal (Barcelona)»

  • el 25 diciembre, 2018 a las 7:48 pm
    Enlace permanente

    Recordo que insultava el publico per demanar cançons que ell ja havia tocat. “Retards”, va dir, més d’una vegada.

Deja una respuesta

WP-Backgrounds Lite by InoPlugs Web Design and Juwelier Schönmann 1010 Wien