Black Rebel Motorcycle Club – Live (DVD) (V2/Nuevos Medios)
Antes de lanzar Beat The Devil´s Tattoo (2010), sexto álbum de estudio del trío si validamos el experimental The Effects of 333 (2008), B.R.M.C. publican referencia en directo bajo el evidente y escueto nombre de Live (2009).
Parece ser que la edición comercializada de este título incluye un segundo DVD con jugosos extras, además de un compacto con los mejores momentos del concierto en audio, pero en la siguiente revisión me ceñiré forzosamente al solitario DVD promocional recibido. En él se incluyen más de dos horas de actuación a lo largo de veintidós cortes registrados en localizaciones de Dublín, Glasgow y Berlín, con Peter Hayes y Robert Levon Been repartiéndose liderazgo para ofrecer un espectáculo vertical, enérgico y sin edulcorantes, donde las canciones cargan con todo el protagonismo.
Al mismo tiempo, ésta resulta buena oportunidad para repasar los casi diez años de carrera de la banda. Y es que, en mayor o menor medida, los discos de los californianos han contado siempre con la comprometida arma de doble filo que supone incluir devastadores sencillos que deslucen a colegas de viaje, dejando parecida sensación el visionado del presente video. Soltar a las primeras de cambio “Berlin”, “Weapon Of Choice”, “Ain’t No Easy Way” y “Stop” eleva el listón a niveles estratosféricos, con el posterior e inevitable descenso de intensidad. No es que “As Sure As The Sun”, la versión del clásico “Dirty Old Town” de Ewan MacColl, “Mercy” o “American X” adolezcan de escasa funcionalidad sobre el escenario, pero los auténticos momentos regresan con “Spread Your Love”, “Love Burns”, “Whatever Happened To My Rock ‘N’ Roll (Punk Song)” o una extensa “Heart And Soul” completando la actuación.
Rodada en un crudo blanco y negro favorecedor para con el estilismo del grupo, la película adolece de excesiva postproducción, con violentos giros de cámara complicando descubrir un plano continuado de más de cinco segundos. El siempre práctico efecto en un videoclip muta aquí en contraproducente al descentrar y cargar al espectador, dejando en cualquier caso un sabroso aperitivo ante la inminente llegada del nuevo trabajo.
