Los Estanques y Anni B Sweet + Temples (Ciclo Alhautor, Alhaurín De La Torre) Málaga 04/08/22
La tercera edición de Ciclo Alhautor, se debe entender como todo un sinónimo de supervivencia, tesón y titánica lucha contra los elementos para sacar adelante una iniciativa tan admirable como disfrutable para los amantes de la música en enclaves únicos y singulares, en plena naturaleza, en concreto en el mágico emplazamiento de la Finca El Portón de Alhaurín de la Torre. Tras años difíciles como los que hemos vivido, llegaba el momento de poder expandirse y decir adiós, ojalá que para siempre, a las fastidiosas limitaciones obligadas por las circunstancias por todos conocidas. Y para este tercer encuentro con la mejor música, qué mejor que aunar a los responsables de una de las grandes sorpresas de la temporada, esa surgida del más que feliz encuentro en las alturas entre esos alquimistas de las melodías enrevesadas y psicodélicas como son los cántabros Los Estanques, y una artista en estado de plenitud cuyo techo no se adivina cercano y que no para de crecer como Anni B Sweet.
Juntos han dado cuerpo a uno de esos discos atemporales con aroma a clásico instantáneo, que seguro será revisitado con los años manteniendo su duende intacto, pues se antoja tocado por la varita de lo especial e irrepetible. Su decisión de atacarlo al completo y por orden, no hace sino subrayar su carácter de obra mayúscula, capaz de enseñarnos nuevos matices en cada desarrollo. Como si hubieran nacido para unir sus destinos alguna vez, los universos de ambos entes creativos se confabularon para iluminar una noche de místico acercamiento a la felicidad, haciéndonos capaces de acariciarla con los dedos, mientras desgranaban los deliciosos entresijos de las historias que componen Burbuja Cómoda y Elefante Inesperado (Inbophonic Records, 2022), un brillante ejercicio de pop mutante que ha venido para quedarse entre nuestros favoritos.
Ese preciso instante en el que se apagan los focos y Anni entona los primeros versos de “He Bebido Tanto (Que…)” son suficientes para generar una atmósfera de celebración que se extenderá a lo largo de todo el repaso a tan sobresaliente debut. Su voz y la de Íñigo Bregel se entrelazan creando una sinergia que suena natural, nada forzada, fluyendo delicada, pellizcando nuestros sentidos. Ese viaje por los instantáneos flechazos de “Bla, Bla, Bla”, “Tu Pelo de Flores”, “Brillabas” o “Caballitos De Mar”, hits indiscutibles en este y en cualquier mundo, funciona a la perfección en su fusión con los recovecos de las menos obvias “Llévame Al Cielo”, “El Sol No Ha Salido Hoy” o “No Te Preocupes”, necesarias a la hora de enriquecer el conjunto, evitando ser rápida e injustamente encasillados en una sola vertiente del pop. Sin apenas tiempo para le interacción con el público para no romper la mística del momento, la puesta de largo de un trabajo que tantas alegrías está deparando, encontró en el escenario de El Portón la mejor localización posible para conseguir que recordemos la noche de ayer durante mucho tiempo.
La elección de los británicos Temples como banda a compartir para tan señalada fecha fue del todo acertada ya que su líder, James Bagshaw, fue el productor de Universo Por Estrenar (Subterfuge, 2019), el salto de Anni B Sweet al castellano y un cambio de sonido que le sentó de maravilla, abriendo una nueva puerta en su carrera que seguro ha de deparar futuras sorpresas. Su pop-rock de querencia psicodélica, que lo mismo bebe de Bowie que recuerda a Tame Impala, consigue llegar cuando cristaliza en singles de innegable pegada como “Paraphernalia”, “Certainty”, “Keep In The Dark”, “Hot Motion” o la primeriza “Shelter Song”, que a la postre pondría colofón a un show de sonido inmaculado y bien hilvanado que dejó con ganas de más.
Y esto no se queda aquí pues la música no se detiene en Alhautor, dejando las puertas abiertas a uno de los fines de semana más señalados en la creciente agenda cultural de la ciudad de la Costa del Sol, que supone un reencuentro con uno de los eventos más singulares y personales de nuestra geografía. Maestros de la autogestión, lo suyo es digno de aplauso y reconocimiento con mayúsculas. Poder seguir siendo testigos de conciertos programados con tanto mimo por atender a los paladares más refinados y singulares en un lugar que huye del ruido de la ciudad para abrazar los espacios verdes lejos de las multitudes, es todo un privilegio que debemos cuidar y valorar.