M. Ward – supernatural thing (Anti / [PIAS])
Me contaba M. Ward hace unos meses que a pesar de llevar más de dos décadas haciendo canciones, todavía no había encontrado una fórmula infalible para crear: «El único camino real es escuchar atentamente a tu primer instinto. Estar al tanto de las cosas más allá de los cinco sentidos; si la música desencadena algo fuera de esos cinco, entonces estás en un buen camino». supernatural thing no es más que un paso más en esa continua búsqueda, que llega tras rendir pleitesía a Billie Holiday con Think of Spring (2020) y a Brian Wilson en Melt Away (2022), su regreso con She & Him, aventura que comparte junto a la actriz y cantante Zooey Deschanel.
Más cercano a Transistor Radio (2005) que al disco con canciones propias al que sucede, un Migration Stories (2020) con el que tiene poco que ver, estamos ante un trabajo coral, rico y variado, en el que el músico de Portland se rodea de buenas compañías para entregar diez composiciones en las que ignora sus propios límites y se da un festín de eclecticismo sin perder su identidad. Ya saben, ese pop-folk de guitarras espontáneo que bebe de los estándares de jazz, el pop de la Costa Oeste, blues del Delta, el surf o el country.
Trazos claramente reconocibles para un M. Ward que pasa de momentos tan lacónicos y poco recargados como «lifeline» a la dulce «too young to die» arropado por las suecas First Aid Kit; que se desmelena en experimentos de folk bluesero sintetizado como»mr. dixon» con Shovels & Rope, se pone enérgico y festivo en «new kerrang» con la colaboración de Scott McMicken de Dr. Dog, o amplía su larga colección de clásicos en la titular «supernatural thing». Donde también se acerca a las nocturnas letanías de su anterior trabajo en «For good», al jazz pop de la vaporosa «dedication hour» con Neko Case de The New Pornographers o rinde su particular homenaje a David Bowie en una mágica recreación casi instrumental de «i can’t give everything away» junto a Jim James (My Morning Jacket) y la trompeta de Kelly Pratt (Beirut).
Si el instinto de Matt le sigue llevando a crear discos como este, estamos de enhorabuena.